PUEBLA.- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) aseguró de manera precautoria a 29 animales que se encontraban en un rancho propiedad del alcalde del municipio poblano de Chalchicomula de Sesma –mejor conocido como Ciudad Serdán-, Juan Navarro Rodríguez.
Como resultado de una inspección, la dependencia determinó investigar el origen de estas especies, ya que no se cuenta con el registro para funcionar como Unidad de manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA) y se carece de un Plan de manejo aprobado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
A raíz de una denuncia, los animales fueron ubicados en el municipio de San Juan Atenco en el rancho Dolores, que es propiedad del alcalde Juan Navarro.
Se encontraron en cautiverio a 29 ejemplares de vida silvestre: 8 venados gamos, 7 papiones sagrados, 5 llamas, 3 dromedarios, 2 avestruces, 2 leones, 1 tigre de bengala blanco y 1 cebra. En la diligencia se verificó su procedencia legal, así como las condiciones físicas y de salud que presenta cada uno.
Los inspectores de la Profepa determinaron que todas las especies provienen del circo Medina, y que fueron adquiridos tras la aprobación de una ley que prohíbe el uso de animales en los circos.
Aunque el edil de Ciudad Serdán es el dueño del rancho, los animales son propiedad de su hermana, quien ha iniciado los trámites ante la Semarnat para obtener su registro como UMA, con un anexo del Plan de manejo para 29 ejemplaros de 8 especies exóticas.
Mediante un comunicado, la Profepa precisó que no detectó situaciones relativas a faltas de trato digno y respetuoso de los ejemplares, pues en términos generales se encuentran confinados en espacios adecuados, y reciben la atención necesaria por parte del personal del rancho.
Precisó que el aseguramiento de los animales persistirá hasta que el predio cuente con los permisos correspondientes, y advirtió que se deben contar con éstos antes de mantener en cautiverio a ejemplares de la vida silvestre, nativa o exótica, a fin de evitar observaciones o sanciones.