COLIMA.- En un hecho inédito para Colima, más de 2 mil 600 maestros del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) realizaron un paro de labores en 112 planteles de educación básica, dejando sin clases a 12 mil alumnos.
La protesta encabezada por la Sección 39 del SNTE lanzó un ultimátum al gobierno del estado para que a la brevedad salde los adeudos que tiene con el magisterio, entre estos bonos, quincenas, estímulos y compensaciones, deuda que supera los 500 millones de pesos.
El líder sindical, José Adrián Orozco Neri, exigió al gobierno del estado una respuesta positiva en menos de dos semanas, de lo contrario advirtió que llevarán a cabo otro tipo de acciones como medidas de presión.
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"Con mucho pesar lo realizamos este paro, tenemos derechos como trabajadores de la educación como a un salario digno y prestaciones establecidas en convenios a nivel nacional", expresó.
Reclamó a la Secretaría de Finanzas una respuesta inmediata, pues se han dejado de pagar las prestaciones que dignifican el salario devengado.
En ese sentido, comentó que este paro laboral lo respalda el Comité Ejecutivo Nacional del SNTE sin embargo reconoció que es doloroso suspender clases en los planteles.
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Orozco Neri detalló que les deben bonos a jubilados y pensionados, bonos de la unidad sindical a docentes y personal de apoyo, nueve días de permisos económicos no disfrutados, la compensación nacional única y el retroactivo al primero de enero, así como estímulos personales.
El líder magisterial no descartó otras acciones en caso de no obtener una respuesta de la autoridad. "Los trabajadores no tenemos la culpa del déficit financiero y de las consecuencias, tendrá que venir la federación a rescatar", consideró.
Dijo que requieren más que la buena voluntad del gobernador Mario Anguiano Moreno para solucionar este problema, pues también esta situación la padecen los docentes de la Sección 6 del SNTE, quien también se podría sumar a las protestas en los próximos días.