Empresarios del sector de la industria farmacéutica advirtieron a la Cámara de Diputados que la iniciativa de reformas a la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público que propone Morena representa "un retroceso", es una proyecto "sesgado" y "riesgoso" para la adquisición de equipos médicos.
En conversación virtual con legisladores de la Comisión de Economía, Comercio y Competitividad, el representante de la Cámara de la Industria Farmacéutica (Canifarma), Jorge Daniel Alarcón, alertó que "la redacción de la reforma está sesgada y mal interpretada en los términos de tiempo de entrega, cantidades o volúmenes a contratar".
Estimó que "no se debe establecer la procedencia de la licitación pública a partir del precio más bajo de la investigación de mercado nacional, sino del precio más bajo con la investigación realizada con proveedores de países con los que se tengan tratados internacionales".
Indicó que la legislación vigente establece el carácter de las licitaciones públicas, que son: nacional, internacional bajo tratado e internacionales abiertas, "de tal manera que en la redacción de la propuesta de reforma visualizamos un riesgo que se corre con no respetar este orden de prelación, vulnerando a la industria establecida en México".
José Antonio Centeno, vicepresidente nacional de sectores y ramas industriales de Canacintra, expresó su "preocupación por las propuestas de reforma a la Ley de Adquisiciones, pues representan un retroceso y una pérdida de oportunidades para construir un sistema de contrataciones públicas eficiente que impacte de manera positiva".
"Las compras de gobierno, por su importancia, deben ser utilizadas de manera estratégica para impulsar el mercado interno y el desarrollo industrial y económico", dijo.
Expuso que "la tendencia es reducir las excepciones en la licitación pública, no aumentarlas; es hacia la transparencia y la rendición de cuentas, no hacia la opacidad ni al ocultamiento".
Juan Pablo Solís, también de la Canifarma, resaltó que con la pandemia, al no existir una vacuna o tratamiento farmacológico, los dispositivos médicos tienen una función importante porque muchas de las complicaciones de los pacientes se tratan a través de ellos. Refirió que "somos el octavo productor de dispositivos médicos en el mundo y el primero en América Latina".
En contraste, "no somos ni siquiera el país número 40 que consume dispositivos médicos per cápita"; es decir, muchos de estos insumos se van a otras naciones. "Queremos darle visibilidad a un sector que genera más de 130 mil empleos directos en nuestro país".
Ana Riquelme Francistain, directora ejecutiva de la Asociación Mexicana de Industrias Innovadoras de Dispositivos Médicos, señaló que la propuesta de adicionar el párrafo quinto del artículo primero de la Ley de Adquisiciones, habla sobre la compra de bienes y servicios a través de organismos intergubernamentales, siempre que de la investigación de mercado se justifique que la licitación no es la forma idónea.
Propuso que la investigación de mercado pueda tener bases normativas para justificar que la licitación no es la forma idónea, que la licitación prevalezca y que solamente en caso de contingencia mundial -como esta pandemia- o local, sea una excepción. Asimismo, que se describa a través de algún cuerpo reglamentario qué se entiende por organismo intergubernamental.
María Antonieta Rodríguez Vizcarra, secretaria de las mesas directivas de Canacintra y Canifarma, precisó que el sector de dispositivos médicos está integrado por más de 180 compañías, con más de 130 mil empleados, quienes desarrollan, fabrican y comercializan apoyos médicos de tecnología innovadora, segura y efectiva, que tienen una función clave en la prevención, diagnóstico, tratamiento, monitoreo y rehabilitación.