México no está viviendo un cambio de Gobierno, sino de régimen, aseguró el presidente Andrés Manuel López Obrador, sobre sus nueve meses de administración.
Esto, dijo en su primer informe, al que él consideró el tercero al pueblo de México, "…no será más de lo mismo, por el contrario, está en marcha una regeneración de la vida pública".
En el Patio de Honor de Palacio Nacional y frente a empresarios, gobernadores, legisladores y representantes de la sociedad, dijo que hay "una transformación profunda, con poca confrontación y sin violencia política. No queremos que desaparezcan las protestas ciudadanas, ni los reclamos de adversarios".
Sobre el crecimiento, aceptó que "la economía crece poco, pero no hay recesión … hay desarrollo y bienestar".
Reconoció que el principal pendiente es la inseguridad, pero que está seguro que lograrán "serenar y pacificar al país".