Alejandro Mondragón, CEO y presidente de Scania México.
La industria del transporte pesado en México necesita evolucionar en al menos, cinco aspectos, por el bien ambiental y para ser apenas comparable con la de naciones desarrolladas como Países Bajos (primer lugar en movilidad sostenible); así como para garantizar mayor seguridad de operadores y peatones. Algo primordial es cumplir con la renovación de unidades, que debería darse entre los 11 y 12 años de vida útil, pero que, en realidad, se da en promedio cada 18 años, según la ANPACT, colocándonos a casi dos décadas de retraso en medidas para controlar el consumo de combustibles que generan gases de efecto invernadero.
Es así que, desde nuestra industria es necesario actuar rápida y estratégicamente, para iniciar una transición a un modelo de transporte más sustentable sin depender de la renovación de flotas y con el que sea menos dañino el uso de combustibles fósiles que emiten contaminantes al aire. Así, consideramos esencial:
Financiamientos para vehículos más eficaces. El gobierno tiene como meta que 50 por ciento de los vehículos comercializados en 2030, sean eléctricos, pero en lo que se habilita el ecosistema necesario, hay que buscar la mayor eficiencia automotriz con camiones que generen el menor C02 y proporcionan mejores rendimientos con menos combustible. Para eso es fundamental implementar una estrategia de financiamiento que haga más atractiva la renovación de flotas, en combinación con incentivos gubernamentales que faciliten las inversiones en nuevas unidades.
Combustibles alternativos. Que los vehículos que funcionen con biogás. Las opciones: gas natural licuado y comprimido, que, en comparación con el diésel, generan menos partículas contaminantes como monóxido de carbono, NOx, hidrocarburos, material particulado y CO2. Asimismo, el aumento de diésel de Ultra Bajo Azufre, permitiría que haya más vehículos Euro VI rodando, así que incentivos fiscales por su uso serían un gran estímulo.
Telemetría y mantenimiento. Con esta tecnología, los dueños de flotas tienen dominio total sobre las métricas de cada camión en tiempos de traslados, kilometrajes efectuados y consumos de combustible que en ellos se gasta, entre otros detalles que, además implican seguridad, alto performance y ganancias. También, es fundamental el impulso a empresarios transportistas para dar adecuado mantenimiento a sus flotas, que ayuda a “rodar” en condiciones óptimas y ahorra gasolina o diésel.
Atención y capacitación al operador. Actualizarlo sobre la tecnología que conduce beneficia la seguridad y hace rendir el combustible, lo que representa menos emisiones contaminantes.
Desarrollo urbano. El 11º objetivo de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 busca la sostenibilidad de ciudades y comunidades. El transporte en general tiene un gran papel en el diseño de una estrategia integral de crecimiento urbano.