Se han realizado estudios que una cantidad de mínima de estrés permite elevar la productividad; sin embargo, cuando se rebasan los límites, tiene un impacto negativo en la calidad de vida de las personas y en su rendimiento en la empresa. Un gerente con enfoque de coaching debe estar pendiente de este elemento para buscar aliviarlo.
Es importante abordar este fenómeno de manera proactiva, ya que el estrés excesivo afecta el bienestar. Por ejemplo, llega a causar insomnio, ansiedad, depresión y una variedad de otros problemas de salud mental y física. Además, disminuye la concentración, la motivación y la productividad, lo que puede tener una secuela en la rentabilidad de la empresa.
Desde una perspectiva de coaching, es factible ocuparse en áreas de acción efectivas, como podría ser la actividad física, el mindfulness, adoptar un estilo de vida saludable, aprender técnicas de gestión del tiempo, la comunicación con quienes te rodean; analizar el entorno para ver si es posible trabajar en equipo o identificar la necesidad de descansos regulares.
Sin embargo, también hay acciones que deben ser tomadas por parte de la empresa como el generar un escenario saludable y seguro para los empleados. Esto incluye proporcionar un espacio ordenado y bien ventilado, así como ofrecer opciones de alimentación y pausas durante el día.
Algunas compañías van más allá y brindan recursos de bienestar, como programas de ejercicio, meditación o zonas de relajamiento que permitan salir de un ambiente antagónico.
Un factor relevante para aminorar el estrés laboral es gestionar la comunicación abierta y efectiva al procurar la interacción entre los empleados y que se sientan más cómodos hablando sobre sus preocupaciones.
En la medida en que sea posible por el tipo de actividad, la flexibilidad de horario y los esquemas híbridos de presencia, sirven para equilibrar la vida personal y profesional, lo que puede reducir el estrés.
Es recomendable asignar cargas de trabajo justas y con tiempo suficiente para completar sus tareas. Además, llevarlo a cabo en equipo hace que los empleados se sientan apoyados y conectados con sus compañeros. Esto mejora la moral y abate el estrés
Es imprescindible proporcionar un ambiente amigable, fomentando la amabilidad y la gratitud, así como también reconocer y celebrar los logros.
El coaching ejecutivo tiene un papel importante en la prevención y el manejo del estrés en el lugar de trabajo. Ayudar a los directores y gerentes a identificar las causas subyacentes de su estrés y a desarrollar estrategias efectivas para abordarlas.
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