Consejos de finanzas para enamorados

Poco romántico parece la vinculación entre dinero y amor; sin embargo, en la realidad juega un papel básico en una relación exitosa, pues se genera sinergia y eleva la posición financiera. Tan es así, que investigaciones han encontrado que los matrimonios alcanzan un mayor patrimonio al compararse con quienes se mantuvieron solteros. Reflexionemos al respecto.

1.- Antes de vivir juntos es conveniente establecer metas y prioridades para darle un sentido al destino de los recursos. Ello implica aclarar las expectativas, como el tamaño de la familia, si trabajarán ambos o con qué tipo de hogar sueñan.

2.- La transparencia es un factor imprescindible en el manejo de los dineros, ya que es probable que uno de los dos se encargue de hacer las cuentas, por cuestiones de tiempo o habilidad en la materia. Es buena la información sobre las transacciones, al ser responsables solidarios de los resultados, olvidándose de la "infidelidad financiera".

3.- Procurar la planificación compartida, pues hay decisiones con visión de largo plazo, como podría ser la futura compra de una casa o qué educación se les quiere dar a los hijos, entre muchas otras cosas. Obliga a pensar en la necesidad de ahorro para lograr las metas.

4.- Es importante decidir la manera en que se organizarán; bien funcionan como "roomies" y cada uno hace sus propios gastos, aportando para los requerimientos comunes o, en contrapartida, se sitúa todo en una sola bolsa, que se administra en forma conjunta.

5.- La comunicación ayuda a darles cauce a las controversias financieras clarificando las aspiraciones individuales y los objetivos de pareja. Determinar en qué gastar y en qué dejar de hacerlo. Fijar niveles mínimos de ahorro y estar conscientes de los compromisos de deuda adquiridos.

6.- El contexto del país también influye y deben de prepararse para sortear crisis como la pérdida de empleo o ingresos insuficientes para cumplir con un patrón de gastos.

7.- El respeto, como en cualquier sociedad, es esencial, reconociendo la libertad de sus miembros, incluyendo la financiera. Por ello, es recomendable permitir un espacio de resolución personal, en donde no se dependa del otro.

8.- La negociación es parte del hacer diario, porque el individualismo en el extremo es causante de desavenencias económicas que pueden llegar en el peor de los casos a la separación.

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