Ricardo Monreal, pastor de los senadores de Morena y el mejor operador político que tiene el presidente, dio el banderazo de arranque rumbo a las elecciones intermedias con la desaparición de las bancadas del PRD y PES y con este movimiento político busca alcanzar, en un primer momento, la mayoría calificada en la Comisión Permanente para convocar a sesiones extraordinarias y luego votar por mayoría simple, la aprobación del uso discrecional del presupuesto por parte de AMLO, amén de otras reformas.
Y lo mismo está ocurriendo en la Cámara baja con la cesión de cuatro diputados de Morena a la fracción del PT, con la intención de desplazar al PRI como tercera fuerza política, que como tal le correspondería presidir la Mesa Directiva de ese órgano deliberativo, durante el tercer periodo de sesiones. Estos movimientos responden a toda una estrategia política-legislativa para aprobar las iniciativas que siguen atoradas y que son parte de la agenda de AMLO para afianzar el poder y con ello llegar fuerte a las elecciones del próximo año y la revocación de mandato del 2022.
El Partido del Trabajo con este movimiento llega a 40 diputados y se ubica a tan sólo seis legisladores del PRI, por ello, no dude estimado lector que en los próximos días más diputados del partido en el poder se sumarán a las filas del PT.
Ante este agandalle legislativo, la oposición, sobre todo en el Senado, no atina a desplegar un contrataque que le permita impedir, en bloque, la desaparición de la bancada de uno de sus aliados, el PRD y por otro lado, anticiparse a otros movimientos que están por darse.
La deserción de la senadora Lilly Téllez de las filas de Morena al PAN fue el detonador de las hostilidades en el Congreso.
Dirán misa los opositores en torno a la desaparición del PRD en el Senado; "que se desconocieron los acuerdos de la Junta de Coordinación Política, en el sentido de respetar la permanencia de todos los grupos parlamentarios con los que inició la Legislatura".
Que se vulneró a las minorías; que no se respetó la voluntad de millones de mexicanos que votaron por el PRD, pero si no se opone todo el bloque opositor al agandalle, de nada servirán las pataletas de coraje que están haciendo en ese partido.
Apunta la diputada amarilla, Verónica Juárez Piña que "aunque Morena no lo acepte, el PRD sigue representando a millones de mexicanos que creen en la verdadera izquierda. Hay que señalar que esta decisión no podría afectar la integración de la actual Comisión Permanente, pues nuestra Constitución establece que la elección de sus miembros la hacen los plenos de ambas cámaras del Congreso al término del periodo ordinario", precisó.
La conducta de Morena es revanchista y antidemocrática. No tolera que se cuestione al Ejecutivo federal, a pesar de que las decisiones equivocadas de su gobierno están teniendo severos perjuicios para la población, comentó la diputada por Jalisco.
"Aspiran a construir mayorías artificiales en el Congreso de la Unión y un gobierno sin contrapesos, buscan minar a toda costa al Poder Legislativo, a los órganos autónomos, al federalismo, a la división de poderes, al Estado de derecho y ahora a la oposición, y eso no lo vamos a permitir", advirtió.