En plena pandemia, los feminicidios y la violencia de género continúan su marcha galopante sin que el gobierno logre revertir tal situación. El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública reportó que de enero a febrero hay más víctimas de feminicidios. En el primer mes de este año fueron 74 y en febrero 92, esto significa un aumento en un solo mes de un 24 por ciento.
Este dato de suyo alarmante mantiene las alertas rojas sobre este tipo de delitos que si le sumamos todos los que tienen que ver con la violencia de género, pues el tema merece toda la atención de los tres niveles de gobierno.
La violencia contra las mujeres no solo ocurre en su entorno, sino que cuando llega el asunto a instancias judiciales, se convierte en otro martirio para la víctima.
Algunos impartidores de justicia no logran comprender lo que subyace en una carpeta de investigación contra una mujer que es procesada bajo el sistema anterior de justicia, ya que de ser víctimas pasan a ser victimarias, por la mala integración de una carpeta debido a testimoniales falsas o de plano a un conjunto de 'pruebas' hechas a modo contra las féminas.
Hay que reconocer que en la CMDX el Poder Judicial ha reivindicado la importancia y el incalculable valor de la mujer, ya que su presidente, el magistrado Rafael Guerra Álvarez, anunció el desarrollo de nuevos modelos de atención y reforzamiento de las estructuras jurisdiccionales para adecuarlas a la realidad que en la materia enfrentan las mujeres.
"Nuestra nación requiere que la seguridad e igualdad sustantiva de la mujer mexicana sea puesta por encima de todos los intereses públicos para generar un impacto institucional que brinde soluciones efectivas y que verdaderamente incidan en su pleno desarrollo", consideró.
Como parte de la nueva estrategia que desarrolla el Poder Judicial, informó sobre la capacitación y sensibilización de todas y todos los operadores de justicia para que la perspectiva de género sea realmente un eje transversal en su actuación jurisdiccional; el reforzamiento de la aplicación de prácticas nacionales e internacionales en la materia para evocar una justicia más humana, siempre con enfoque de género, que promueva el respeto, la atención y la solidaridad.
"Queremos contribuir sustancialmente a impulsar una transformación cultural a través del ámbito jurisdiccional", resumió Guerra Álvarez, al puntualizar que como corresponsables y garantes de los derechos de las mujeres, las y los titulares de los órganos de justicia deben sumarse de manera decidida y efectiva a cumplir con los compromisos que plantea la estrategia.
Sin embargo, este discurso no llega a algunos impartidores de justicia, quienes con un sesgo misógino y machista violan sistemáticamente los derechos fundamentales de las mujeres, así como lo referente a lo que mandata el artículo 19 constitucional.
Desde luego, obran en nuestro poder resoluciones a incidentes que niegan el cambio de medida cautelar a mujeres, por criterios obtusos y claramente machistas que violan los ordenamientos en la materia y sobre todo son atentatorios contra la perspectiva de género que se promueve desde el Consejo de la Judicatura de la CDMX.