Desde San Lázaro

Parálisis y más deuda

La nueva administración ya se dio cuenta de que la 'cobija' no alcanza para todo, a pesar de que aseguraban que con lo que se iban ahorrar en combatir la corrupción y adelgazar la burocracia se cumpliría con todo.

El gobierno de López Obrador realizó su segunda emisión de deuda de este año con la colocación de dos mil 500 millones de euros; el primero fue por mil 500 millones a siete años, con vencimiento en 2026, la segunda colocación fue por mil millones de euros a 20 años, con vencimiento en 2039, con ello se cubrió el 100 por ciento de las amortizaciones de deuda externa de mercado programadas para 2019.

El presidente de México se ha cansado en afirmar que no iba a contratar más deuda ni a subir los impuestos ni tampoco a crear nuevos; sin embargo, a pocas semanas de su gestión, pues resultó que no era cierto.

Ya con la responsabilidad en sus hombros y con los datos duros, la nueva administración se ha dado cuenta que la cobija no alcanza para todo, a pesar de que decían que con lo que se iban ahorrar en combatir la corrupción y adelgazar la plantilla laborar, amén de otras economías, se cumpliría con todo, además de los nuevos programas sociales, amén de los megaproyectos de infraestructura como el tren maya.

Lo real es que con el costo que representó la cancelación del aeropuerto de Texcoco; la absurda compra de pipas que, por cierto, a la fecha sólo están trabajando un 20 por ciento del total contratado, y otras fugas de dinero como el pago del resguardo del avión presidencial, no será posible llegar a un superávit primario en este año.

El arranque del sexenio ha sido tortuoso, más de lo esperado, y es causado por la impericia en manejar algunos asuntos que son torales en construir la confianza ante los inversionistas y los mercados; de hecho, el desplome de la captación de ingresos y la baja en la expectativa de crecimiento del PIB, son algunas señales que le dan consistencia a la aseveración.

La economía esta frenada; ni el gobierno ejerce el gasto, ni el sector privado se anima a invertir.

Ya López Obrador contrató más deuda, y por desgracia no tarda en emprender medidas que le signifique tener más captación de ingresos tributarios, esto significa que, para el próximo año, tendremos varias noticias que amargarán más la vida a la base tributaria que, al final del día, es la que va a dar viabilidad a los programas sociales del mal llamado gobierno de la 4T.

Para hechos

Desde San Luis Potosí recibimos noticias de que, en este entorno económico convulso e incierto, el gobernador Juan Manuel Carreras López está haciendo la tarea a la hora de optimizar los recursos públicos en aras del crecimiento económico del estado y en generar condiciones favorables para que los sectores marginados transiten hacia mejores estadios de vida.

Daniel Pedroza Gaitán, secretario de Finanzas del gobierno del estado, presentó a nombre del Ejecutivo la Cuenta Pública correspondiente al ejercicio fiscal 2018, ante la Sexagésima Segunda Legislatura del Congreso del estado.

El secretario indicó que dichos resultados se basan en los criterios y políticas que el gobernador estableció desde el inicio de su administración: finanzas ordenadas, control del gasto, disciplina presupuestal, austeridad y eficiencia en la recaudación propia.

En razón de ello, el funcionario destacó los principales resultados del desempeño de las finanzas públicas: incremento en los ingresos propios y en los provenientes de la federación; control de gasto; mayor inversión pública; reducción de pasivos de corto plazo; reducción de la deuda estatal, y mejores posiciones en indicadores financieros a nivel nacional.

En San Luis Potosí bajó la deuda, se incrementaron los ingresos propios y federales y con ello se canalizaron recursos al rubro de inversión.

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