En la entrega pasada comentaba sobre el optimismo alrededor de la posibilidad de que la economía estadounidense empezara a crecer en los últimos meses de este año, y que seguramente esto 'jalaría' a la economía nacional, especialmente en el sector de exportaciones.
Ante todos los indicios que señalan que la estrategia de Estados Unidos para enfrentar la pandemia y reducir las defunciones por Covid-19 ha sido un rotundo fracaso, y el hecho de que el mismo presidente Donald Trump implícitamente 'anunció' que estaría dispuesto a llevar a su país a una controversia constitucional si pierde las elecciones en noviembre, no entiendo por qué hay tanto optimismo. Los analistas que seguimos de cerca el proceso electoral en Estados Unidos asumimos que en la noche del 3 de noviembre no habrá resultados que definan quién es el siguiente presidente de Estados Unidos.
En este momento, una de las 'estrategias electorales' de Trump y sus asesores es de suprimir el voto, que incluye tomar pasos para dificultar votar por correo. parecería que Trump asume que mientras más personas salgan a votar, aunque sea enviando su boleta electoral por correo, incrementa la posibilidad de que no sea reelecto. Por eso, desde la Casa Blanca han surgido una serie de litigios en contra de estados que están buscando facilitar el voto por correo. Inclusive, ha surgido una fuerte crítica por el reciente nombramiento esta semana del nuevo director de Correos, por ser una persona allegada a Trump y que ya está tomando pasos para debilitar la capacidad de entregar boletas electorales por parte del "United States Postal Services".
La crisis constitucional al no saber quién es el siguiente presidente de Estados Unidos podría durar hasta enero 2021. Por ende, la incertidumbre podría tener un serio impacto en la recuperación económica de Estados Unidos, contagiando a la economía mexicana al iniciar el año electoral 2021 en México.
Y aunque no hubiera una crisis constitucional, y las elecciones fueron pacíficas y sin contratiempos, también no se puede subestimar el hecho de que los brotes y rebrotes de Covid-19 durante la temporada de influenza, no vaya a tener un impacto en los índices de empleo y la reapertura de comercios. En este momento, no se ha regularizado el cruce de personas entre México y Estados Unidos. De hecho, el gobierno estadounidense esta semana hizo, de nuevo, un llamado a sus connacionales para no viajar a México debido a la situación por el Covid-19 en el país. Hubo además algunos trascendidos periodísticos de que la Casa Blanca estaba considerando restringir aún más la entrada de personas por la frontera entre ambos países, incluyendo restringir el regreso de ciudadanos estadounidenses a su país.
Pero, seamos optimistas. Vamos a asumir que Trump hace un giro importante en la forma que maneja la pandemia por el Covid-19 y con eso reduce el número de contagios. O recemos porque los resultados electorales no produzcan una crisis constitucional. O siendo muy, muy, muy optimistas, pensemos que la economía estadounidense crece en una forma desaforada.
Recuerden que, en ese mundo fantasioso, esto no significa que Estados Unidos jalaría y ayudaría a mitigar la catástrofe económica que se vivirá en México.
A pesar de que el PIB de Estados Unidos creció 2.3 por ciento en 2019. ¿Cuánto creció México ese mismo año? Fue -0.1 por ciento, o sea que la economía de Estados Unidos no sirvió de palanca, sino que la economía mexicana dejó de crecer.
Como les comenté en las últimas entregas de esta serie 'Julio 2021', aunque la crisis económica actual está relacionada con la pandemia por el Covid-19, la realidad es que la crisis venía de 2019, debido a las políticas económicas, fiscales y comerciales implementadas por el presidente Andrés Manuel López Obrador y su visión para la cuarta transformación.
Si AMLO no cambia, la crisis económica será sin precedentes.
Y en este sentido, para México no importa qué fórmula gane en noviembre, ya sea Joe Biden/Kamala Harris o sea reelecto Donald Trump/Mike Ponce. Lo que importa son las decisiones del presidente Andrés Manuel López Obrador y cuánto está dispuesto a sacrificar para asegurar que Morena siga controlando la Cámara de Diputados y asegurar la elección de varios gobernadores y cientos de presidentes municipales morenistas.
En donde sí pudieran afectar los resultados de las elecciones estadounidenses sería en el ámbito migratorio. En este momento se está construyendo una crisis humanitaria sin precedentes en la frontera entre ambos países, debido a la crisis de salud, económica y de seguridad. ¿De cuántas personas estamos hablando? Este análisis en la siguiente entrega.