El desabasto de medicamentos que hemos visto en los últimos dos años no será nada comparado con lo que se experimentará en los primeros cuatros meses de 2021. Como hemos abundado en este espacio, el gobierno decidió hacer las compras masivas de medicamentos en el extranjero, a través de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS).
Así es, la actual administración, encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), decidió cortar relaciones con la industria farmacéutica establecida en México y hacer la compra de medicamentos para 2021-2024 a través de la agencia de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Para ello, como hemos referido aquí, a finales de octubre se firmó el millonario contrato correspondiente para la primera etapa de la compra masiva.
Sin embargo, en una de las cláusulas del contrato firmado, la agencia de la ONU establece que todo el proceso de compra de 384 claves de medicamentos se iniciará una vez que se haga el correspondiente pago por alrededor de 32 mil millones de pesos (mdp).
Con esto no queda duda alguna acerca del porqué de las prisas legislativas en octubre por llevar a cabo las reformas a la Ley General de Salud para desaparecer el Fondo de Salud para el Bienestar, pues después de esos cambios el gobierno federal puede disponer de 33 mil mdp, cantidad similar a la de la compra masiva de medicamentos a través de la UNOPS.
Así es, UNOPS exige hacer el pago completo antes de mover un dedo. Aquí en México casi todas las farmacéuticas, mayoristas y distribuidores pueden narrar historias de terror acerca de la forma en la que históricamente el gobierno les ha pagado, después de plazos muy largos, incluso años, como sucedió con Maypo (una de las tres firmas mayoristas que AMLO vetó en marzo de 2019), a quien el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) le debe montos millonarios desde 2017. Y ese sólo es un ejemplo de muchos.
A la UNOPS, en cambio, hay que pagarle primero, y como no ha recibido el pago hasta el momento, los trabajos de adquisición de medicamentos no han iniciado. Se trata de un proceso complejo y tardado. Una vez que hagan las órdenes de compra, cada empresa productora empezará con la fabricación. Y estamos a finales de noviembre, diciembre es un mes de sólo dos semanas para efectos prácticos.
Por ello, el gobierno ha llamado a las compañías farmacéuticas establecidas en México para ver si pueden extender los contratos que actualmente tienen, porque ya se dieron cuenta de que no tendrán medicamentos ni insumos médicos para surtir al sector salud en los primeros meses de 2021, lo que es desastroso si se considera el actual contexto de pandemia de Covid-19.
Entre tanto, el panorama es desolador, pues el sistema de salud completo está muy desgastado después de tantos meses en los que ha tenido que atender la emergencia sanitaria, periodo en el cual no sólo ha tenido que trabajar a marchas forzadas sino, en muchas ocasiones en precarias condiciones tanto para el personal de salud como para los pacientes.
Esta negligencia, porque no hay otra forma de calificarla, ha cobrado muchas vidas en los últimos dos años (como en el caso de los niños con cáncer por falta de medicamentos oncológicos) y seguirá cobrándolas en 2021, porque el desabasto de medicamentos e insumos médicos no se ha debido tanto 'a la corrupción', sino a la ignorancia acerca de cómo se hacían las compras consolidadas y cómo funciona una industria como la farmacéutica, la cual necesita de contratos firmados y de varios meses para cumplir con los pedidos del gobierno.
Para colmo, si a esto sumamos que la calidad de los fármacos que llegarán por parte de la UNOPS para los siguientes años no está garantizada por nadie y que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), se ha convertido en los hechos en una oficina de mero trámite (como bien ha señalado el Inefam, de Enrique Martínez y José Carlos Ferreyra), el riesgo es mayúsculo. Al tiempo.
Sala de urgencias
Con más de un millón de casos confirmados y alrededor de 105 mil fallecimientos en México por Covid-19, según cifras oficiales, estamos en un nuevo repunte de la pandemia. A decir los epidemiólogos, hemos regresado al nivel que teníamos a finales de julio y principios de agosto. Por tanto, no es momento de relajar los cuidados, sino al contrario. Utilice bien el cubre nariz y boca.