Energía para todos

Los verdaderos traidores a la Patria

Los huachicoleros fiscales (los que venden y compran) son los verdaderos traidores a la Patria.

Esta semana, todos los integrantes de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados recibieron una denuncia anónima en la que, con nombres y apellidos, se describe el modus operandi del huachicol fiscal que trasiega libremente en las aduanas de la zona norte del país.

El documento hace alusión a un listado de empresas que aprovechan sus permisos de importación para hacer entrar al país combustibles que hacen pasar por naftas aditivadas (que no pagan IEPS), y con ello pueden competir de manera desleal en el mercado ofreciendo producto en redes sociales hasta en 15 pesos el litro, como lo hemos comentado en este espacio.

La denuncia llamó poderosamente la atención de los legisladores, quienes la giraron a las instancias correspondientes para que pueda ser investigada, sin embargo, al ser anónima pierde poder y por supuesto que les causó desconfianza.

En este mismo tenor, el jueves los gasolineros del país agrupados en la Onexpo alzaron la voz. Afirmaron que "el mercado ilegal e irregular de petrolíferos (gasolina y diésel) ha seguido creciendo y, en varias regiones del país, afecta a la economía de un importante número de estaciones de servicio que compran productos de origen lícito y cumplen con los requisitos y las normas aplicables al comercio".

Y no es para menos, el huachicol fiscal les quita mercado, los ahoga. Los huachicoleros fiscales (los que venden y compran) son los verdaderos traidores a la Patria, quienes disfrazados de empresas correctas, han armado toda una estructura organizada que roba al país y deja pérdidas, que como todo mercado negro e ilegal, son difíciles de cuantificar, pero que algunos afirman que podrían ser hasta 500 millones de pesos diarios que el fisco ha dejado de recaudar (sí, de ese tamaño es el monstruo), unos 40 mil millones de pesos al mes.

Hay que recordarles además, a los traidores, que en Artículo 1, inciso C de la Ley Nacional de Extinción de Dominio, marca que aquellos delitos en materia de hidrocarburos y petroquímicos pueden ser sancionados con dicha acción donde el Estado toma posesión de sus bienes; sin mencionar que la propia Ley Federal para Prevenir y Sancionar los Delitos Cometidos en Materia de Hidrocarburos, contempla prisión para quienes cometan este tipo de robo a la nación.

Ahí, dice la ley, que si el crimen asciende a dos mil litros del combustible, la pena es de 12 a 17 años de prisión; bueno, pues de acuerdo con una investigación que llevó a cabo la prestigiosa firma OPIS, existen elementos para afirmar que tan solo en diciembre de 2020 entraron al país 40 mil barriles diarios de huachicol fiscal, algo así como 2.3 millones de litros en cada jornada.

Dicen los gasolineros que otra grave consecuencia del huachicol fiscal es la afectación del ambiente, porque el combustible importado irregularmente incumple las especificaciones de la NOM-016-CRE a la que se sujeta la producción, importación, distribución y expendio de gasolinas y diésel en nuestro país, por lo que nos estaría mal comenzar con inspecciones por parte del organismo regulador en materia energética.

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