Para operar en un entorno seguro no basta solo con reforzar la infraestructura de sistemas. Es de igual importancia entrenar y capacitar a nuestro personal en mejores prácticas para mitigar el riesgo cibernético. Recordemos que gran parte de los ataques exitosos cuentan con la participación voluntaria e inadvertida de las personas. Es decir, con dar un click al enter, permitimos el acceso de malware u otros programas maliciosos. O al entrar a sitios falsos y capturar nuestra información, comprometemos nuestras credenciales y dejamos expuesta nuestra información.
Por lo anterior es muy importante mantener una capacitación constante sobre los diferentes en tipos de ataque y mejores prácticas para evitarlos. En los últimos meses, con una operación remota en muchos casos, los factores ansiedad y estrés pueden agudizarse e incrementar la vulnerabilidad de nuestros colaboradores y de nuestro ecosistema. Por lo tanto, hoy más que nunca reforzar algunas medidas clave con sus colaboradores que operan desde casa:
1.- Asegure que todos tengan programas de protección cibernética en los dispositivos de casa y dispositivos móviles, incluyendo protección a sus redes WiFi. Preguntemos y proveamos la asesoría o soporte que necesitan.
2.- Verifique que sus empleados mantengan sus aplicaciones vigentes y actualizadas. Aplica para celulares, computadoras, etc.
3.- Refuerce la necesidad de acceso a las aplicaciones bancarias o financieras solo a través de sitios seguros o de las aplicaciones oficiales.
4.- Evite abrir mensajes SMS de números no conocidos, correos de origen desconocido o noticias de portales no comunes que mencionan buenas noticias sobre la pandemia, ya que pueden llevar a ligas para descargar malware.
5.- Recomiende que la operación desde casa sea idealmente desde un lugar privado y sin dispositivos cercanos que puedan ser escuchas.
6.- Establezca comunicación diaria o muy frecuente con sus equipos para detectar cualquier situación inusual, inesperada o anómala.
7.- Asegure tener los teléfonos y medios de comunicación directa con banqueros y proveedores de servicios financieros.
8.- Mantenga comunicación periódica con proveedores, clientes y pares para compartir mejores prácticas o riesgos detectados.
9.- Renueve la certificación de calidad crediticia de sus colaboradores críticos, y finalmente,
10.- Establezca mecanismos de apoyo moral y psicológico a los equipos claves, para mitigar y paliar preocupaciones o angustias.
En esta nueva normalidad de operación remota, es muy importante estar conscientes de los riesgos cibernéticos. Redoblar protocolos de conocimiento y protección a sus equipos críticos les evitará riesgos e impactos financieros innecesarios. La buena noticia es que lograrlo no es muy complejo y le traerá grandes beneficios de manera permanente.