"Esta no es una época de cambio, sino un cambio de época".
María Teresa Arnal
¿Qué es una crisis?
Una crisis se presenta cuando las circunstancias cambian y, la manera de hacer las cosas, simplemente ya no resuelve nada, crisis de adolescencia es cuando un hijo pasa de ser niño a ser adolescente, ya no lo podemos tratar como niño, ya no nos funciona, hay que cambiar el modo de tratarlo. Las crisis también tienen grados, hay algunas sencillas de resolver, otras son más complicadas y hay otras que nos obligan a cambiar radicalmente la manera de hacer las cosas. La pandemia que estamos viviendo es una de estas últimas.
Un ejemplo.
Una lluvia en la Ciudad de México es una crisis manejable, el tráfico se retarda, hay algunos choques, pero al cabo de unas horas se vuelve a la normalidad. Una tromba es una crisis más aguda, los árboles se derrumban, los bomberos intervienen desazolvando, el recorrido de 30 minutos se vuelve de una hora. Pero en un día se vuelve a la normalidad. Una crisis profunda sería el sismo del 19 de septiembre de 1985, crisis que nos obligó a cambiar radicalmente muchas cosas (el reglamento de construcciones y su supervisión, por ejemplo). Aquí estamos hablando de una crisis, al menos, de esa magnitud.
Modificando y readecuando la estrategia
La crisis nos demanda primeramente volver a diagnosticar la situación (las premisas han cambiado) y entonces: tomar nuevas decisiones sobre la estrategia a seguir, sobre el modelo de negocio que adoptaremos para salir de la crisis, y finalmente nos llama a ejecutar con fortaleza lo que hayamos decidido
En la elaboración del nuevo diagnóstico tendremos que ver qué recursos tengo (cuáles no he perdido) a qué recursos puedo acceder, de qué tipo y a qué costo (recursos humanos, financieros, tecnológicos). En cuanto al entorno tengo que saber qué pasó, cómo y por qué se me cayó la demanda, cómo le ha ido al giro en que estoy, si hay nuevas oportunidades aprovechables. Recordemos que en la elaboración de este diagnóstico parecería que uno está bien informado por el exceso de información; cuidado, lo que hay son muchos datos, algunos son fake news, hay que reflexionar bien, si es posible en grupo, y tener un resumen de hechos e implicaciones (constantemente depurado) para que todos compartan la misma base (de datos).
Replanteando el modelo de negocio
Recordemos, un modelo de negocio tiene básicamente cuatro elementos: clientes, propuesta de valor, operaciones y dónde creamos valor (dónde generamos utilidad) ¿Serán los mismos? ¿Qué tendré que modificar en mi propuesta de valor? En Nueva York los restaurantes se volvieron licorerías, en Xochimilco los que surtían restaurantes ahora surten a domicilios particulares, Wal-Mart México está contratando cinco mil personas para surtir pedidos a domicilio. Amazon está creciendo mucho. Quizá habrá que plantearse escenarios posibles, muy probablemente el trabajar a distancia (home office) llegó para quedarse, a lo mejor toda la empresa se va a un modelo más virtual, tercerizado. Pensar con mucho cuidado el tema de recursos humanos, se trata de personas que viven de lo que ganan, y que además al salir de la crisis necesitaremos, ya dependerá de la situación por la que atraviesa la empresa si se pueden retener y cómo; vale la pena ser creativo y cuidar a nuestro personal (siempre lo agradecerán). Financieramente puedo empezar a pedir plazos y descuentos a proveedores, que seguramente querrán que les hagamos pedidos.
Mi colega Federico D'Kuba afirma que "necesitas hacer tres cosas: 1) reducir costos y gastos al mínimo minimorum, 2) cuidar el efectivo al máximo maximorum y 3) actuar de inmediato. Piensa en un escenario en donde las ventas de tu negocio se caen entre 50 y 70 por ciento y no habrá manera de que le pidas prestado al banco, ni a ningún otro inversionista"...
Flotar, seguir vivo y esperar proactivamente lo que viene
Sucede como en aquella anécdota de un náufrago en medio del mar y sin bote salvavidas; su primer objetivo es sobrevivir flotando, pero el simple flotar no lo salvará, acabará cansándose y ahogándose, así que hay que estar muy pendiente y muy alerta para saber hacia dónde nadar, hacia dónde está la tierra firme que nos permitirá recuperarnos...
Recordemos un viejo proverbio chino: "Los buenos generales, dan órdenes temprano en la mañana..., y las modifican (según lo acontecido) en la tarde"; ante las crisis hay que estar muy listos para replantearse estrategia y modelos de negocio.