En su libro "What Management is?", Joan Magretta, quien fuera editora durante muchos años de la afamada revista Harvard Business Review, asegura que el gran avance que ha experimentado la humanidad en los últimos dos siglos no ha sido debido a inventos tan importantes como la electricidad, el telégrafo, o incluso la maquina de vapor o el motor de combustión interna, ni siquiera el teléfono o, para ser más actuales, el Internet.
No, lo que más ha empujado el progreso ha sido el desarrollo de un área del conocimiento que podríamos llamar "Management", es decir, el estudio de la empresa y cómo ésta es dirigida (y aquí debemos decir que el término "administración" no expresa con exactitud todo lo que abarca el management).
El diccionario Ingles-Español es simple, y traduce management como administración o dirección, así por ejemplo el "General Manager" equivaldría al director general, por ello quizá la palabra dirección está más cerca del significado verdadero de management.
Este campo del conocimiento, que también tiene sus "teorías y postulados", además tiene otra característica distintiva. No fue desarrollado por académicos tradicionales, como sucedió con las ciencias, sino más bien por directores prácticos ("practicioners" o personas que sabían hacer y ese saber hacer era muchas veces fruto de su creatividad y de su capacidad de innovar.
Un artículo, publicado precisamente en la Harvard Business Review, señalaba algunas de las que considera las más grandes innovaciones del management. Para ser incluida en la lista, la innovación tenía que contestar sí a las siguientes tres preguntas: ¿Es un cambio radical? ¿Da ventaja competitiva a quien lo adopta? ¿Aún se practica?
Las siguientes innovaciones son algunas de las que pasaron la prueba de las tres preguntas: management científico; contabilidad de costos, análisis de variables; investigación de mercados; análisis de ROI, costo de capital; gerencia de marcas; divisionalización; desarrollo de liderazgo; análisis estratégico formalizado; participación de los empleados en la solución de problemas.
Y confirmando cómo se va desarrollando este campo del conocimiento, el gran gurú del management (quizá el más acreditado del siglo XX), Peter Drucker, afirmaba que éste impresionante desarrollo debía más a grandes managers como Alfred Sloan, el legendario director de la General Motors, o a Jack Welch, el carismático director de General Electric durante más de 20 años, que a los académicos del ramo.
A todo esto, es curioso observar cómo el desarrollo de este campo del conocimiento ha ido evolucionado en su concepción de la persona; en sus inicios, el hombre (la persona) era considerado como un "engrane" más, que tenía fuerza en los brazos y podía hacer ciertas cosas que una máquina no haría; no se consideraba su capacidad intelectual, solo se tomaba en cuenta su "fuerza motriz" (o "tracción animal" como afirmaba uno de mis maestros de ingeniería) y tampoco se consideraban sus aspiraciones, necesidades y anhelos (se le pagaba un salario y punto).
Es evidente que esta concepción no podría dar resultados aceptables, la persona humana es más compleja, más intensa y mas rica en sus particularidades; es así que el propio desarrollo del management poco a poco fue incorporando las capacidades intelectuales de quienes en ella laboran (hablamos actualmente, y con naturalidad de empresas inteligentes o de capacidad de aprendizaje, capacidad que tienen las personas, no las empresas, aunque se las "adjudicamos" a las empresas).
Adicionalmente, se fue pensando en la empresa como en una "comunidad" donde las personas se desarrollan y se realizan, estas dos importantes tendencias toman en cuenta al hombre en su totalidad y no como un simple animal que aporta fuerza de trabajo a cambio de un salario, es decir, el enfoque actual toma en cuenta —como debe de ser— principios antropológicos validos y verdaderos.
Quizá por todas estas razones el management no es simplemente un área más de conocimiento. No es, sin duda, uno de los temas más importantes a entender si buscamos un desarrollo eficaz de las personas y por ende de la comunidad.