Avances tecnológicos, modelos de trabajo flexibles y fuentes alternas de talento redimensionan el sentido del workplace.
Son tendencias que encontraron cabida en los espacios híbridos y permiten a las empresas afianzar el regreso a las oficinas, contrario a los pronósticos de su fin o al efecto de una gran renuncia que al paso de los meses aligeró su impacto.
Para el mercado de oficinas en las principales ciudades de México el efecto se debe a un ciclo previo de expansión, ajustes en la demanda de espacios producto de la pandemia y al impacto de la huella de los inquilinos, que según las empresas de servicios inmobiliarios encontrarán su equilibrio en 2024.
La encuesta Capturing the rewards of work transformation realizada globalmente por WTW deja claro que el cambio va más allá de los modelos de colaboración. Factores de índole económica, política, social y ambiental respecto a los avances de la inteligencia artificial afectan cómo y dónde se realiza el trabajo.
En su reciente visita a México Carl Hess, CEO global de WTW me compartió una visión enfocada en el potencial positivo de la transformación del trabajo y cómo los empleados de distintas generaciones cambian su expectativa sobre el crecimiento de la oferta laboral.
Es por ello que la tecnología ofrece más alternativas, pero también el efecto de las redes sociales crean un mayor eco en las quejas.
Por tanto, Hess ve en el costo e incorporación de más tecnología en los espacios, el reto de los cambios, así como la línea del bienestar laboral.
Sostener nuevas formas de trabajo plantea a los líderes anticipar consecuencias posteriores de sus decisiones, gestionar proactivamente los riesgos y aprovechar las oportunidades.
La encuesta revela que las organizaciones que se preparan y gestionan riesgos de personas comerciales y operativas están mejor posicionadas para aprovechar el potencial positivo de la transformación del trabajo.
Los encuestados, revelaron que en tres años las organizaciones esperan que más de la mitad de sus empleados estén trabajando en estructuras híbridas o completamente remoto.
En materia tecnológica cuatro de cada cinco empresas, es decir 80 por ciento, incrementarán 35 por ciento el trabajo completado vía automatización.
Esto implica reciclar y mejorar las habilidades de ciertos segmentos de su fuerza laboral y desplegar talento basado en habilidades y el rediseño de sus marcos profesionales.
Por ello, más de la mitad de las organizaciones espera ver oportunidades en crear valor haciendo un mejor uso de las nuevas fuentes de talento, al ampliar su alcance geográfico vía el trabajo remoto.
La promesa laboral refleja riesgos en la transformación del trabajo, por el cambio en las condiciones, la combinación de talento y tecnología, es decir riesgos interrelacionados entre personas, negocios y operaciones.
En la encuesta, siete de cada diez mejora el equilibrio de la vida personal y laboral, pero a cuatro de cada diez les preocupa que éste tenga un impacto negativo en sus carreras, mientras que la mitad se siente desconectado de su equipo.
Como nunca, el bienestar laboral enfrenta desafíos para el desarrollo profesional y representa un riesgo empresarial por los bajos niveles de compromiso, que reducen la productividad y la calidad de los productos y servicios.
Se trata de una nueva arquitectura laboral, de la cual sólo 54 por ciento la tiene y ofrece, además del riesgo operativo frente a una nueva territorialidad, y la vulnerabilidad de la conectividad remota. Cambios importantes que abren nuevas oportunidades.