Latinoamérica, al igual que el resto del mundo, está viviendo una etapa de incertidumbre, en la cual la integridad de las cadenas de suministro se ha convertido en un problema crítico, con disrupciones que afectan a industrias claves en la región como la agricultura, la manufactura y el sector automotriz. Los desafíos impuestos por situaciones comerciales, sociales y ambientales, aunados a una creciente demanda en las expectativas de los consumidores y al alza del comercio electrónico, el cual Americas Market Intelligence estima que aumentará en un 25% entre 2021 y 2025, ha exigido que las cadenas de valor busquen nuevos caminos hacia la resiliencia en un corto tiempo.
Para Latinoamérica, la integración en las cadenas de valor globales también representa un motor económico fundamental. Sin embargo, de acuerdo con el Banco Interamericano de Desarrollo, la participación de nuestra región en las cadenas de valor globales sigue siendo baja (18%) en comparación con Asia (28%) y Europa (34%). La oportunidad que tiene la región para mejorar la integración en el mercado global mediante el fortalecimiento de sus cadenas de suministro podría beneficiar a las comunidades locales y elevar la competitividad.
Mercados locales como México han observado que sus cadenas de suministro son cada vez más complejas, con una creciente demanda por materiales de mayor calidad, mejores prácticas de producción y métodos de distribución confiables, al tiempo que enfrentan desafíos en términos de seguridad, inflación, regulaciones y falta de profesionales capacitados, además de la necesidad en general de desarrollar infraestructura marítima, terrestre y aérea.
En este contexto, la oportunidad que herramientas como la inteligencia artificial y las soluciones en la nube aportan a las cadenas de valor no tiene precedente, con la Comisión Económica para Latinoamérica y el Caribe destacando su capacidad de reducir costos de operación y generar ahorros. No obstante, la Comisión también menciona que los niveles de digitalización siguen siendo bajos y observa que, pese a que el 90% de las compañías tienen acceso a internet, la mayoría no lo utiliza al tratarse de los canales de suministro y distribución.
Desarrollar resiliencia en las cadenas de suministro
La realidad es que las compañías aún luchan por responder ante los choques cada vez más frecuentes que padecen las cadenas de suministro. Las empresas están lidiando con petabytes de datos esparcidos entre sistemas existentes, de ERP y soluciones personalizadas, lo que genera una vista fragmentada de su cadena de suministro. Un estudio reciente comisionado por Microsoft a Harvard Business Review Analytic Services, muestra que las cadenas de suministro no son lo bastante flexibles para adaptarse rápidamente a las demandas del mercado, con el 70% de los participantes dependiendo de sistemas heredados o de una estrategia única para las operaciones de la cadena de suministro, mientras que el 65% de los ejecutivos afirman que la falta de acceso a los datos de la cadena de suministro en tiempo real es un obstáculo tecnológico para sus operaciones.
La capacidad que tienen las empresas de conectar sus datos y obtener conocimientos accionables, se ha convertido en un factor de éxito determinante. Aprovechando las capacidades de Microsoft Supply Chain Platform, las organizaciones pueden obtener la claridad necesaria para reconocer las señales adecuadas dentro de su propia operación, habilitándolas para mejorar procesos actuales y establecer las bases para optimizaciones futuras, lo cual puede propiciar el crecimiento y las perspectivas para mejorar aspectos importantes como la sostenibilidad.
Funciones específicas de gerencia operativa en Microsoft Supply Chain Center, incluyendo módulos preintegrados, buscan resolver las interrupciones a la cadena de suministro durante el proceso de pedidos, lo que permite a los responsables de las decisiones asumir una postura más proactiva y ágil en sus operaciones cotidianas para atender necesidades actuales y futuras.
Para nosotros es fundamental desarrollar este tipo de soluciones, que ayuden a construir una cadena de suministro más inteligente. Trabajamos con organizaciones de gran escala para ayudarlos a optimizar sus procesos de forma personalizada. Consideramos que una cadena de suministro ágil es esencial para perseverar en el entorno económico actual, por lo que contar con la visibilidad y capacidad de tomar acciones informadas con base en los datos, de manera segura y sustentable tiene el potencial de reinventar esta vertical.