EL QUE RÍE al último ríe mejor, dice el viejo refrán. Y al final la terna conformada por Joe Biden, John Kerry y Ken Salazar fue la que más festejó el domingo cómo la contrarreforma eléctrica se vino abajo.
Apenas unos 17 días antes, los tres principales representantes del gobierno de Estados Unidos habían sido auténticamente vapuleados por un Andrés Manuel López Obrador muy echado para delante.
“Hay una gran diferencia entre escuchar, informar, conversar, comunicarnos. ¿Qué es la comunicación? Son mensajes de ida y vuelta. Es mucha la diferencia a imponer, un grupo para vigilarnos, observarnos, eso pues no lo permite nadie. A lo mejor sí, en otros tiempos, gobiernos sumisos, entreguistas, pero ya no son los tiempos de antes”, dijo al otro día del encuentro.
Pero tras esa última visita del enviado de la Casa Blanca para el Cambio Climático a Palacio Nacional, y su inmediata comunicación con Biden desde la sala blindada de la embajada, la suerte de la reforma constitucional obradorista quedó sellada.
Los diputados de oposición tenían la consigna de no dejar pasar en el Congreso la iniciativa de López Obrador porque ello implicaba ponerle punto final al Tratado de Libre Comercio.
Quien mejor pudo ilustrar el domingo lo que estaba en juego fue el diputado priista Ildefonso Guajardo, exsecretario de Economía en el sexenio de Enrique Peña Nieto y, precisamente, negociador del llamado TMEC con Estados Unidos y Canadá.
Durante su intervención de 15 minutos, Guajardo Villarreal alertó sobre las penas financieras, económicas y políticas a las que nuestro país y los mexicanos se expondrían si la contrarreforma de la 4T era aprobada, porque era violatoria de varios capítulos del tratado.
México podía ser llevado a un arbitraje internacional, a un panel inversionista-Estado, exponía al país a la indemnización de unos 36 mil millones de dólares y a otras represalias y sanciones, como la imposición de aranceles especiales a los principales productos de exportación.
Tan claro y elocuente fue Guajardo que ayer mismo, en su conferencia mañanera, el tabasqueño arremetió contra él, a quien acusó de mentiroso y entreguista.
INICIARON YA LOS primeros acercamientos de los interesados en comprar Citibanamex. Tras la reciente visita a México hace una semana de Paco Ybarra, CEO de la División de Clientes Institucionales de Citi, se abrió el data-room con la información de los activos a desincorporar. Ybarra, le informé, es el ejecutivo al que responsabilizó Jane Fraser la operación. Pero el encargado directo del día a día de las negociaciones es su brazo derecho, Manuel Falco, director general de Industria Global de Citi. Él y Manuel Romo ya empezaron a recibir las manifestaciones de interés de Banorte que preside Carlos Hank González, Santander de Ana Botín y de un grupo de inversionistas que aquí le hemos venido mencionando y que parece ser el que más pelea dará porque se alinea a la pretensión del presidente Andrés Manuel López Obrador: un conjunto de empresarios nacionales solventes que aseguren la mexicanidad de Banamex, la retención de sus activos culturales y la permanencia intacta de la planta laboral del banco y sus principales filiales. Lo encabeza Antonio del Valle Ruiz y van con él Alfredo Harp, Roberto Hernández, Valentín Diez Morodo, Alonso de Garay y, muy posiblemente, Carlos Slim.
CURIOSAMENTE, DESDE QUE llegó hace tres años a la presidencia Andrés Manuel López Obrador, muchos de esos empresarios que hoy están siendo convocados a rescatar Banamex expandieron parte de sus negocios a España. María Asunción Aramburuzabala es el caso más ejemplar: la exaccionista de Banamex migró sus empresas de tecnología e inmobiliarias a la península ibérica. En Madrid está invirtiendo fuerte en vivienda residencial. Es el mismo caso de Fernando Chico Pardo, que sigue adquiriendo hoteles en la capital y en destinos de playa como Palma de Mallorca. Otro inversionista mexicano en bienes raíces en Madrid, y que se ha incorporado recientemente, es Rodrigo Lebois, el accionista mayoritario de Unifin. Asimismo, apunte a Mauricio y Luis Amodío de Grupo CAABSA que invirtieron en OHL. Otros tres son Cosme y Alberto Torrado en restaurantes de Grupo Alsea, y Carlos Slim en construcción también. Así que de cara a los embates del inquilino de Palacio Nacional, una creciente actividad empresarial mexicana en España.
EN CONTRAPARTIDA, LOS que se repliegan en México son los de Grupo Prisa para reagruparse en Colombia. El movimiento táctico tiene que ver con la realineación de intereses de su presidente, Joseph Oughourlian, fundador de Amber Capital. Está vendiendo parte de sus intereses, incluida las operaciones de Radiópolis en México, que dirige Francisco Cabañas, a la francesa Vivendi. El avezado financiero por lo visto se desencantó de nuestro país, con todo y que lo llevó de la mano a Palacio Nacional a conocer a Andrés Manuel López Obrador su socio de Milenio y Grupo Multimedios, Francisco González. Oughourlian ve con más interés a Colombia, a donde trasladará la redacción del periódico El País reduciendo a 30 por ciento la estructura de México. Y es que un accionista fuerte de Amber era Horacio Serpa Uribe, tres veces candidato a la presidencia de ese país por el Partido Liberal Colombiano y exgobernador del departamento de Santander. La relación de Oughourlian ahora es con su hijo Horacio Serpa Moncada y la apuesta es por un proyecto político más ambicioso.
UN TOTAL DE 17 empresas participaron en la junta de aclaraciones del IMSS para la licitación de distribución de medicamentos e insumos para la salud. Mañana los pupilos de Zoé Robledo estarían recibiendo las ofertas económicas para un contrato que implica el desplazamiento de 565 millones de cajas entre mayo y diciembre. El importe de este concurso rondará los 2 mil 200 millones de pesos. Apunte como potenciales tiradores a Farmacéutica Medikamenta, Almacenaje y Distribución Avior, Maypo, Ils Integradora Logística, Médica Farma Arcar, Gfam, Creatividad e Integración, Vantage, Compañía Internacional Médica, Healt Pharma Control, Soluglob, 3Ti, Pharma Tycsa, C&M Distribuidora de Medicamentos y Material de Curación, Medistik, Dab Logística Administrativa, Levic y GNK. El fallo está programado para el próximo 4 de mayo.