La Cuarta Transformación

Consolidará a la banca el Covid-19

Akya, firma de consultoría estratégica que fundó Daniel Reséndiz, plantea que el mayor impacto financiero para los bancos está por verse.

Si bien los niveles de capitalización, rentabilidad y salud de la cartera de los bancos son sólidos al primer trimestre del año, ya empieza a preocupar el efecto que la pandemia va a tener en esta actividad.

Bajo el sugerente título de ¿Introducirá el Covid-19 un proceso de consolidación en el sector bancario mexicano?, Akya, firma de consultoría estratégica que fundó Daniel Reséndiz, plantea un escenario prospectivo.

La magnitud y velocidad con que la banca reaccione para ofrecer productos y servicios esenciales para paliar las consecuencias de la crisis que viene, será determinante en la sostenibilidad de individuos y empresas.

Refiere que el mayor impacto financiero para los bancos está por verse. Si bien la mayoría empezó a enfrentar la crisis desde una posición financiera sólida, hay otros que podrían deteriorarse en el corto plazo.

Menciona los bancos challengers: de escala pequeña/mediana con buenos niveles de rentabilidad que pueden mantenerse independientes y en crecimiento, pero también en la mira de los shapers.

Estos últimos son bancos con buen desempeño relativo con el constante reto de incrementar la escala sin diluir su rentabilidad y son los potenciales adquirentes de bancos en posiciones menos favorables.

A su vez los bancos vulnerables los que en un contexto como el de esta crisis del coronavirus podrían estar expuestos a recibir del regulador alertas tempranas, aunque en estos momentos cumplan su capitalización.

Estos podrían ser adquiridos hasta en el corto plazo a valuaciones bajas. Su imperativo es preservar el control de su operación a partir de elevar su valor y escala, lo que se ve cuesta arriba en medio de esta crisis.

Finalmente están los bancos targets para consolidación, que son los grandes, pero de bajo desempeño relativo, que en caso de ser consolidados con otros más eficientes lograrían mejores costos y sinergias.

Pero dice Akya que en México son pocos los grandes que tienen un desempeño por debajo de sus competidores, pero que conforme se vean afectados por esta crisis serían candidatos a que los consoliden.

Los bancos challengers, de acuerdo con el mapeo, son Mifel de Daniel Becker, Monex de Héctor Lagos, Base de Lorenzo Barrera, Compartamos de Carlos Danel e Invex de Juan Guichard.

También Bansí de Jorge Montes, BanCoppel de Enrique Coppel, Intercam de Eduardo García, Consubanco de Ramón Chedraui y American Express de Santiago Fernández.

Los shapers son BBVA de Eduardo Osuna, Banorte de Carlos Hank, Santander de Héctor Grisi, Citibanamex de Manuel Romo, HSBC de Jorge Arce, Banregio de Manuel Rivero y Bajío de Salvador Oñate.

En el grupo de bancos vulnerables de Akya considere a Actinver de Héctor Madero, Afirme de Julio Villarreal, Bx+ de Antonio del Valle y Sabadell de Francesc Noguera.

También a Autofin de Juan Antonio Hernández, Bancrea de Ernesto López Clariond, Banco Famsa de Humberto Garza y Banco Inmobiliario Mexicano de Víctor Manuel Requejo.

En este mismo grupo, con el índice más bajo del sistema, Forjadores que lleva Eduardo Priego, Finterra a cargo de Mark McCoy, ABC de Mario Laborín y Accendo de Francisco Javier Reyes de la Campa.

Finalmente en el segmento de los bancos target para consolidaciones, Scotiabank que preside Adrián Otero, Inbursa de Marco Antonio Slim Domit y Banco Azteca de Ricardo Salinas Pliego.

El análisis fue elaborado por Román UribePedro ZaragozaSamuel Jurado José Estefan.

SON MÁS DE mil millones de dólares los que Aeroméxico tiene en caja, pero ante el tamaño del impacto de la pandemia del Covid-19 se le pueden ir como agua. De ahí que, como le informé, la aerolínea que dirige Andrés Conesa esté volcada ya en una reestructura financiera con el apoyo de White & Case, de Hugh Verrier, y Citi, de Michael Corbat. La compañía acaba de devolver cinco Boeing 737-800 a arrendadores internacionales y dio de baja siete Embraer. Eran contratos onerosos que vencieron. La firma que preside Javier Arriguna se apresta a suprimir unos 160 puestos de pilotos.

EL GRUPO R de Ramiro Garza Cantú es otro que igualmente ya trabaja con sus acreedores para mejorar su posición financiera de cara a un segundo semestre que se ve de terror. La empresa que maneja Ramiro Garza Vargas ya trae de asesores al prestigiado bufete neoyorquino Moelis & Company, y aquí a ADS, de los banqueros Isauro AlfaroRicardo Dávila Pedro Scherer. El sector del oil & gas es de los más golpeados en este momento no sólo por la caída de los precios del petróleo, sino por la debilidad financiera de Pemex, principal cliente de Grupo R.

NO PIERDA DE vista a Unifin, la compañía de Rodrigo Lebois. Si bien la financiera que dirige Sergio Camacho asegura estar blindada con garantías, colaterales y facturas de los equipos y productos que arrienda, no está exenta de un susto en el contexto de la insolvencia generalizada de sus clientes. De ahí que el grupo de control esté pretendiendo hacer una recompra de hasta 140 millones de acciones de la compañía. Necesitan levantar cerca de 107 millones de dólares en los próximos días. En el mercado se habla de que Fernando Chico podría apuntalarlos otra vez.

EL FONATUR, QUE que dirige Rogelio Jiménez Pons, emite hoy fallo de la licitación para la supervisión técnica y verificación de control de calidad de los trabajos de construcción de plataforma y vía del Tramo 1 del Tren Maya. Son 227 kilómetros que corren de Palenque, en Chiapas, a Escárcega, Campeche, que fueron adjudicados a la portuguesa Mota Engil, que preside José Miguel Bejos. Lideran para llevarse el contrato de supervisión Cal y Mayor y Asociados, de Patricio Cal y Mayor, y Triada Diseño Gerencia y Construcción, que encabeza Gustavo Rocha.

EN ESPAÑA SE daba por hecho que Luis y Mauricio Amodío retiraban su oferta de compra de OHL, pero el jueves los mexicanos anunciaron la adquisición de un paquete de 16 por ciento con derecho a voto, que ya los hace accionistas de referencia. Los papeles eran de la familia de Juan Miguel Villar-Mir, señalado por Andrés Manuel López Obrador como corruptor de Enrique Peña. Los Amodío estuvieron cabildeando con la 4T esta compra. La respuesta fue: "sí, siempre y cuando saquen totalmente a Villar-Mir". Pero no termina de quedar claro si efectivamente cumplieron.

COLUMNAS ANTERIORES

El ‘auxiliar en la recaudación’
Edomex: los confictos de Alfredo

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.