De Jefes

México requiere 80 mil viviendas en renta

Aunque no toda esa demanda requiere vivienda nueva, hay una evidente carencia que no se está abordando adecuadamente.

En México, el mercado de arrendamiento enfrenta una creciente demanda que exige alrededor de 80 mil nuevas viviendas anuales para satisfacer las necesidades de alquiler, según Francisco Andragnes, CEO de Homie. Aunque no toda esa demanda requiere vivienda nueva, hay una evidente carencia que no se está abordando adecuadamente.

“Yo creo que se requieren más o menos unas 80 mil viviendas al año para que el mercado, toda la nueva demanda se vaya satisfaciendo. No todas están en renta y no todos necesitan ser vivienda nueva, pero sí hay una necesidad fuerte en la ciudad que no se atiende”, dijo en entrevista con el reportero Fernando Navarrete.

Los planes de la próxima administración para desarrollar vivienda asequible y en renta, liderados por Infonavit, son vistos con optimismo por el sector. Andragnes destacó que la participación del Infonavit podría motivar a otras instituciones públicas como Fovissste y la Sociedad Hipotecaria Federal para crear más esquemas que impulsen la oferta de vivienda en renta.

“Incluso a Serviste dentro de la misma CDMX con su proyecto de vivienda en renta, en general el sector público se está dando cuenta que el plan anterior que era solamente empujar la propiedad no es una solución sostenible”, agregó.

Homie, una plataforma que ya cuenta con nueve años en el mercado mexicano, se ha consolidado con la firma de 500 contratos mensuales, y una demanda que supera ampliamente la oferta. Con una creciente necesidad de viviendas en renta, el próximo sexenio podría marcar un cambio significativo en el panorama habitacional del país, un momento que Andragnes define como una oportunidad única para la industria.

“El mercado de renta está muy caliente, hay muchísima demanda, nosotros como compañía firmamos unos 500 contratos por mes, pocas empresas tienen esa escala. Y hay más de 10 mil personas que buscan esos 500 contratos que se firman cada mes, entonces la realidad es que hay una demanda creciente, una oferta muy limitada de departamentos, eso hace que las rentas suban”, detalló.

Lecciones de NY para la CDMX

Un año después de la entrada en vigor de las estrictas regulaciones de estancias cortas en Nueva York, la ciudad sigue luchando con el alza de los precios inmobiliarios y hoteleros. A pesar de las promesas de la normativa de mejorar la accesibilidad de la vivienda, los efectos han sido contraproducentes: el precio medio de los hoteles en Nueva York subió 7.4 por ciento en los últimos 12 meses, complicando la estadía para los turistas y afectando a los comercios que dependen de su gasto.

Para Theo Yedinsky, vicepresidente de Políticas Públicas de Airbnb, la normativa no sólo no resolvió la crisis de la vivienda, sino que además impactó a las comunidades en los barrios periféricos de la ciudad, elevando los costos de los viajes. Este aumento de precios y el freno al turismo son un claro ejemplo de cómo una política bien intencionada puede tener efectos adversos cuando no se evalúa correctamente.

Este contexto puede ofrecer lecciones importantes para la CDMX, donde las reformas propuestas por el gobierno local en torno al arrendamiento de corto plazo están generando inquietudes similares. Los efectos negativos que Nueva York ha experimentado podrían ser un llamado de atención sobre la necesidad de un enfoque más equilibrado, que promueva tanto la protección de la vivienda como el impulso económico que genera el turismo y los arrendamientos de corta estancia.

Para evitar un escenario similar, será clave que las autoridades mexicanas dialoguen con todos los actores involucrados y evalúen cuidadosamente las posibles repercusiones antes de implementar medidas restrictivas en este sector clave.

La batalla legal por Palmas 915

Nos dicen que con la llegada de Clara Brugada al gobierno de la CDMX, se reactivará el proyecto inmobiliario de Palmas 915 en Lomas de Chapultepec, un desarrollo suspendido desde hace nueve años debido a la falta de permisos y la fuerte oposición vecinal. El proyecto, impulsado por Grupo GICSA, contempla un complejo de lujo con 17 pisos y 11 niveles de estacionamiento, algo que excede los límites permitidos en la zona, donde sólo se admiten construcciones de hasta tres niveles.

Vecinos argumentan que esta megaobra amenaza con sobreexplotar el suministro de agua y llevar al límite el sistema de drenaje. Además, sostienen que el proyecto no cumple con las normativas ambientales ni urbanas. A pesar de estas preocupaciones, se ha reportado un acuerdo entre la inmobiliaria y el gobierno de la CDMX para seguir adelante con el desarrollo.

El alcalde de Miguel Hidalgo, Mauricio Tabe, ha señalado que las obras de esta magnitud deben cumplir con la ley y contar con el respaldo de la comunidad, algo que no parece estar sucediendo en este caso.

Advertising
Advertising