MoradaUno, una startup mexicana dedicada a la protección de rentas, anunciará que logró superar las 25 mil rentas administradas y espera triplicar su crecimiento hacia 2025. La empresa colabora con más de 5 mil asesores inmobiliarios y más de 500 inmobiliarias en 12 ciudades del país, ofreciendo sus servicios de protección de renta que cubre el retraso en el pago y el respaldo legal y financiero para la recuperación de un inmueble en arrendamiento, además de evaluar el riesgo de los inquilinos sin necesidad de avales.
“En México rentar un inmueble es complicado para el inquilino y riesgoso para el propietario, independientemente del uso que se le dé, ya sea comercial, industrial o residencial. Con esto en mente, fundamos MoradaUno hace cuatro años buscando resolver los problemas que siguen impactando en la calidad de vida de todos los que rentamos”, declaró Santiago Morales, CEO de MoradaUno.
Con el respaldo de fondos internacionales como Y Combinator y Cometa, MoradaUno busca hacer un cambio positivo en el sector de rentas en México.
“Además de la base tecnológica, tenemos más de 40 abogados que asisten en la elaboración, revisión y firma de contratos, y en la resolución de los conflictos, impagos y controversias que surgen durante las rentas. Hemos tenido un 100 por ciento de éxito en los más de 100 asuntos civiles litigados en más de 40 juzgados. Nuestro equipo especialista de mediación y cobranza ha solucionado más de 3 mil retrasos y conflictos reportados”, agregó Morales.
Opacidad militar: el caso de Mexicana
El sexenio que está por concluir ha estado marcado por un protagonismo inusual del Ejército y la Marina en la administración de recursos y proyectos civiles, con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) asumiendo roles que van más allá de sus competencias militares. Una de las muestras más evidentes de esta expansión es la operación de la nueva aerolínea del Estado, Mexicana, que ha quedado bajo control militar. Esta creciente militarización de áreas civiles ha traído consigo un preocupante manto de opacidad.
En la presentación de la aeronave Embraer 195-E2, que volará bajo la marca Mexicana a partir del próximo año, se observó una actitud hermética. Los elementos militares escoltaron a la prensa en todo momento, impidiendo el contacto con los directivos de la aerolínea y las preguntas, un reflejo de la falta de transparencia en un proyecto financiado con recursos públicos.
A esto se suma la total reserva de información sobre los contratos de la aerolínea y la adquisición de sus aeronaves, así como los millonarios costos asociados a su operación. El manejo discrecional de 8 mil millones de pesos anuales y los 21 mil millones destinados al pago de aviones no ha sido explicado ni detallado a los contribuyentes. Esta falta de claridad plantea serias dudas sobre la responsabilidad y la transparencia de una administración pública que ha cedido proyectos clave a instituciones militares, cuyo carácter reservado choca con los principios de rendición de cuentas.
Para abrir boca
El restaurante Mi Gusto Es, que comenzó en el 2003 como un pequeño local con cuatro mesas en la Ciudad de México, se ha convertido en un grupo que ahora cuenta 43 sucursales de sus cuatro marcas: Mi Gusto Es, Culichioso, Tebori y Dulce Rojo, que atraen a más de medio millón de comensales al año y mueven más de 228 toneladas de insumos entre mariscos, pescados y carne.
Para este año, nos dicen que la cadena planea ‘abrir boca’ con su tercera sucursal de su concepto Culichioso, en Toluca, con lo que espera incrementar en 10 por ciento las visitas a sus restaurantes para 2025.
Culichioso ofrece recetas generacionales de cocina casera, y actualmente cuenta con dos sucursales, una en Metepec, Estado de México, y una en Cuernavaca, Morelos, que en su conjunto reciben en promedio cuatro mil visitantes mensuales.
“Mi Gusto Es es una embajada del sabor sinaloense y sonorense, traemos platillos tradicionales, nos adaptamos a las tendencias gastronómicas de la región y las traemos al centro del país, siempre dándoles nuestro toque propio. Respetamos mucho los sabores e ingredientes originales, y les damos ese giro y ese complemento que nos hace únicos, así lo hicimos desde el inicio, y hoy lo hacemos en cada uno de nuestros conceptos”, aseguró Humberto Herrera, cofundador y director de operaciones del grupo restaurantero.
Cabe resaltar que esta cadena también cuenta con una división de pasteles y postres llamada Dulce Rojo, cuya primera unidad se abrió en 2013, y que actualmente opera 26 sucursales en el Estado de México. Por lo pronto, Mi Gusto Es espera cerrar el año con más de medio millón de visitantes, y recibir la próxima época de cuaresma a más de 80 mil comensales.