No hay mucho tiempo disponible para hacer ajustes a la Ley Federal del Trabajo por más que las tres principales fuerzas políticas representadas en la Cámara de Diputados coincidan en la necesidad de hacerlos con carácter de urgente.
La siguiente semana el total de los diputados "chapulines" habrán de pedir licencia para ocupar nuevos retos políticos y quienes tendrán que votar por los cambios, en el 50 por ciento de los casos, no estarán familiarizados con el tema.
Se trata de la subcontratación que ha exigido el que la Ley Federal del Trabajo sea modificada en los artículos décimo quintos (A, B, C).
Porque sin la modificación que se planea seguirán existiendo empresas de outsourcing que realicen acciones que eludan o evadan descaradamente el pago de sus obligaciones como patrones por más que el patrón real detrás de cada subcontratación sea otro distinto que el que paga.
Se afirma extraoficialmente, al menos así lo ubica el diputado de Veracruz, Julio Saldaña Morán, que en México habrán de existir un total aproximado de 900 firmas de subcontratación, de las cuales, solo 40 habrán de cumplir todas las obligaciones que como patrón exige la LFT.
Las demás evaden o eluden al fisco, sus obligaciones ante el trabajador y los lineamientos establecidos ante el IMSS.
Estas prácticas deshonestas implican pérdidas al fisco e impiden que las familias de los trabajadores cuenten con una mayor protección social.
Lo saben, lo reconocen y lo admiten los diputados tanto del PAN como del PRD y del PRI. En una reunión privada el pasado martes el promotor de los cambios a la LFT, Julio Saldaña, del PRD, reunió a sus pares de otras bancadas y a especialistas en la materia. Todos los diputados de filiación distinta a la del Partido de la Revolución Democrática reconocieron que es urgente cambios a la Ley para que los trabajadores tengan mayor cobertura en su seguridad social y para evitar que malas empresas le "vean la cara" al SAT.
Pero.... hay tiempos que no son los mejores para pensar en que esos cambios puedan llevarse a cabo. El líder perredista, Jesús Zambrano, reconoció en corto que desafortunadamente los diputados de otras filiaciones, a pesar de que reconocen la urgencia de modificar la LFT es por todos conocidos "que no se gobiernan solos" y que escasamente habrá por delante 12 sesiones en las que muy difícilmente podrán conseguirse los cambios que se procuran.
De todas maneras no van a bajar la guardia y van a sudar la camiseta de esos cambios hasta que el último minuto para legislar se agote.
Porque además de este impedimento hay por parte del Senado una iniciativa para modificar la LFT precisamente en sentido contrario a lo que los diputados procuran pues, aún viniendo de Senadores priistas de extracción sindical, ellos quieren que se quiten todos los candados en materia de subcontratación para propiciar más empleo aunque con ello se pueda garantizar la evasión de las responsabilidades de prestación social de las contratantes.
El próximo martes se desarrollará un foro organizado por la bancada perredista en el que se insistirá en llevar al pleno la discusión de las iniciativas de los diputados. Puede haber consenso en los cambios requeridos por la LFT pero la mitad de los diputados involucrados en la votación habrán de salir de sus puestos luego del trámite de solicitud de licencia y ello implica que el 50 por ciento de los "nuevos" diputados no tengan la menor idea de qué se trata el tema.
O sea que... todo indica que el asunto pudiera navegar por las aguas del olvido. Ya será en otra legislatura donde ya el 100 por ciento de los diputados ni idea tengan del asunto y habrá que comenzarse desde cero.
Así es la democracia "a la mexicana". Ni hablar.