Presidente de Bursamétrica
Aún y cuando no tenemos datos oficiales más que de enero, en donde el IGAE cayó 4.2 por ciento anual, y el propio INEGI estima que en febrero la economía se contrajo 4.0 por ciento anual, es posible que en marzo la actividad económica presente una contracción mínima, y que el PIB del primer trimestre en su conjunto haya caído solo 3.0 por ciento anual.
De acuerdo a nuestro indicador anticipado el IBEM (Indicador Bursamétrica de la Economía Mexicana) es probable que el IGAE de marzo baje en solo 0.87 por ciento anual. Aquí tiene los datos: El Indice (IBEM) se ubicó en 121.16 unidades vs. 111.37 puntos de febrero, con un incremento del 8.79 por ciento mensual, equivalente a una variación positiva del 2.05 por ciento anual.
La base de comparación de marzo del año pasado, es más baja que la que se tenía en los meses de febrero y enero, en virtud de que en esos meses del año 2020 no se habían aplicado las medidas de contingencia social que pararon la actividad económica en actividades no esenciales. Las primeras medidas de confinamiento social se empezaron a aplicar en el último tercio de marzo del 2020. Los indicadores conocidos de marzo muestran una recuperación en el sector manufacturero, y en el mercado interno, mejor a la anticipada, al grado que todos los componentes del índice le favorecieron.
• El indicador ISM del sector manufacturero americano marcó mejoría importante al subir de 60.8 en febrero a 64.7 unidades en marzo.
• Las ventas de las cadenas comerciales de la ANTAD en tiendas comparables aumentaron 1.75 por ciento real anual, mientras que en febrero cayeron en 6.52 por ciento real anual.
• El Indicador Mexicano de Confianza Económica del Instituto Mexicano de Contadores Públicos / Bursamétrica en su componente de la percepción actual observó una importante mejoría al situarse en 63.04 puntos desde los 59.14 puntos en febrero.
• El Índice Mexicano de Confianza Económica (IMCP/Bursamétrica) en su subíndice de la Percepción de la situación a futuro mejoró de 62.81 unidades en febrero a 66.78 unidades en marzo.
• El Índice de Precios y Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores, como un indicador de expectativas, ha crecido en 39.78 por ciento en los últimos 12 meses.
• El precio de la mezcla mexicana de exportación de petróleo en términos de pesos, creció en 87.3 por ciento anual en marzo.
• Las ventas domésticas de autos cayeron 5.93 por ciento anual en marzo; mientras que en febrero bajaron en 21.09 por ciento anual.
• La producción automotriz creció en marzo en 12.52 pro ciento anual, mientras que en febrero bajó en 26.77 por ciento anual.
• Las exportaciones automotrices disminuyeron 13.24 por ciento anual en marzo, mientras que en febrero disminuyeron en 19.54 por ciento anual.
• El indicador IMEF manufacturero mejoró en marzo a 50.70 unidades respecto a 49.10 puntos de febrero.
• El indicador IMEF no manufacturero mejoró en marzo a 52.80 unidades respecto a 49.40 puntos de febrero.
• El número de trabajadores afiliados al IMSS bajó en marzo en 2.28 por ciento anual, mientras que en febrero la reducción fue de 3.28 por ciento anual.
Como puede observarse, la actividad se recupera tanto en el sector exportador manufacturero como en el mercado interno. ¿La pregunta es que tan sostenible es esta recuperación?
Los datos que vamos a ver en los siguientes tres meses van a ser muy altos, en términos anuales. No se descarta ver un IGAE de abril, por ejemplo, cercano al +20 por ciento anual. Pero en estas cifras el factor de la base de comparación juega un papel preponderante.
Sin embargo, el constante golpeteo a la confianza de los agentes económicos, la falta de respeto al Estado de derecho y el clima de inseguridad siguen perjudicando severamente al gasto de inversión, que en nuestro país sigue cayendo a un ritmo cercano al 10 por ciento anual:
La Ley de la Industria Eléctrica.
La Ley de Hidrocarburos.
La ley sobre el trabajo por outsourcing.
La insistencia en la nominación de Salgado Macedonio a la gubernatura del Estado de Guerrero, y las amenazas al INE.
La extensión del periodo de la presidencia de la SCJN del ministro Arturo Zaldívar.
La reducción obligatoria de las comisiones de las Afores, para mantener el control del Poder Judicial.
Las revisiones de las condiciones contractuales en los gasoductos, en las cárceles construidas y operadas por la iniciativa privada, y en sí la violación a los contratos de los permisionarios o contratistas del Gobierno.
El retraso del pago a los proveedores y contratistas de Pemex y CFE.
Las nuevas regulaciones en materia de empaque y etiquetado.
La expropiación del Club Campestre de Tijuana por parte del gobernador.
Del otro lado tenemos una oportunidad dorada con los programas fiscales y de infraestructura del gobierno de los Estados Unidos. Nuestro vecino y socio puede crecer 7.0 por ciento este año y un promedio de 4.0 a 5.0 por ciento en los siguientes años. ¿Porque no nos ponemos a pensar conjuntamente como podemos aprovechar esta gran ventana de oportunidad?