Economía empresarial

¿Qué tan bien preparado está México para adoptar la inteligencia artificial?

La inteligencia artificial (IA) es una tecnología que tendrá un impacto profundo en la economía. La IA implica riesgos, pero también puede generar importantes beneficios y ganancias en productividad. No todos los países están igualmente preparados para adoptar la IA y aprovechar las oportunidades que ofrece. ¿Qué tan bien preparado está México en este sentido?

El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha compilado un Índice de preparación para la IA en el que evalúa a los países con base en información proveniente de diversas instituciones y fuentes oficiales. El índice puede tomar un valor entre 0 y 1. Mientras mayor sea el índice del país, mejor preparado estará para aprovechar la IA. Es importante notar que el índice no mide el liderazgo tecnológico o científico, sino que se enfoca en la capacidad de hacer uso de la IA.

El país que alcanza un mejor resultado es Singapur (valor del índice de 0.8), seguido por Dinamarca (0.78) y Estados Unidos (0.77). Por su parte, Sudán del Sur es la nación más rezagada con un valor del índice de tan sólo 0.1. Vale la pena resaltar que el FMI sugiere no interpretar al índice como un ranking, en parte porque algunos de sus componentes son indicadores basados en percepciones sujetos a un cierto grado de subjetividad. Más bien, debería ser usado como un punto de referencia para entender el grado de desarrollo de un país en este sentido.

De cualquier forma, conocer el lugar que ocupa México nos da una idea de qué tan bien está preparado nuestro país para la adopción de esta tecnología en comparación con otros países. México (valor de 0.53) ocupa el lugar 56 entre 174 países si los ordenamos de mejor a peor preparados. En Latinoamérica, Chile (0.58), Uruguay (0.55) y Costa Rica (0.54) son los únicos que alcanzan valores mayores que nuestro país.

El índice está formado por cuatro componentes. La suma del valor de cada uno de estos componentes es el valor del índice total. El primer componente es el de infraestructura digital. Este incluye indicadores como usuarios de internet por cada 100 mil habitantes, costo de acceso a internet y uso de teléfonos móviles para transacciones en línea. En este, México obtiene un valor de 0.13 y se ubica en el lugar 57, empatado con economías como Argentina y Uruguay.

Los otros tres componentes son el de capital humano y políticas del mercado laboral, el de innovación e integración económica y el de ética y regulación. Estos componentes incluyen indicadores como graduados de carreras STEM, habilidades digitales de la población, el gasto en investigación y desarrollo como porcentaje del PIB además de encuestas de percepciones como la de adaptabilidad del marco legal a los modelos de negocio digital del Foro Económico Mundial. En estos tres componentes, México obtiene un valor de 0.13 o 0.14 y se encuentra en el lugar 48 o 49 mundial, aunque empatado con muchos otros países.

El Fondo Monetario Internacional destaca que debe haber un equilibrio entre los componentes de este índice ya que unos factores se complementan con otros. Por ejemplo, una infraestructura digital bien desarrollada no puede ser aprovechada si no se tiene una fuerza laboral con las habilidades y conocimientos necesarios. Estos dos componentes son el fundamento indispensable para lograr mayor innovación. De igual forma, un marco regulatorio deficiente puede llevar a un mal uso de la IA o a desincentivar la innovación y las ganancias en productividad.

De acuerdo con el índice de preparación para la inteligencia artificial del Fondo Monetario Internacional, México está en el primer tercio de países mejor preparados para hacer uso de esta importante tecnología. El valor que obtiene México en el índice (0.53) está por encima del valor promedio para las economías emergentes (0.46) y de Latinoamérica y el Caribe (0.43). Por otro lado, está muy por debajo del valor de su propia región comercial, Norteamérica (0.74).

De esta forma, México está relativamente bien posicionado para aprovechar las ventajas que puede traer consigo el uso de la inteligencia artificial. Sin embargo, hay varios indicadores que componen al índice en los que hay áreas de mejora importantes. Por ejemplo, el gasto en investigación y desarrollo de México como porcentaje del PIB es 0.27%, mientras que el promedio mundial es de 2.62%. Por su parte, en las encuestas de efectividad gubernamental y de voz y rendición de cuentas, México se encuentra entre el 43% más bajo a nivel internacional.

La conexión que se mencionó entre los diferentes componentes del índice implica que es importante corregir los aspectos en los que un país se encuentra más rezagado para aprovechar las promesas que encierra la inteligencia artificial. Esta debería ser una prioridad de la nueva administración pública federal debido a la importancia de esta tecnología. Ojalá que se ponga atención en estos temas.

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