Ciudad Abierta

El 30 de mayo, la meta

Podemos pensar que aún se ve muy lejos el 30 de mayo, pero también podemos pensar que cada día que pase estará más cerca y que podemos llegar a la meta sanos, junto con nuestras familias.

Hoy, la premisa mundial fundamental es: "Quédate en tu casa". De los muchos mensajes que, según han circulado en las redes, se han acuñado para convencer a la gente de hacerlo, el que más me gusta es el de Italia: "A nuestros abuelos les pidieron que fueran a la guerra, a nosotros solo nos piden que nos quedemos en casa". Parece fácil, pero para muchos el confinamiento resulta una condición difícil de sobrellevar, a pesar de todo lo que hoy en día nos ofrece la tecnología. En la aldea global en que vivimos, en realidad permanecer en casa no significa encierro.

En el caso de México, una gran parte de la población ha acatado esta disposición, pero muchos, que suman millones, no. Si se entra a apple.com/covid19/mobility se puede ver cómo ha disminuido la movilidad de autos y personas en las calles a partir del 13 de enero: el tránsito ha caído en 73 por ciento y los peatones en 66 por ciento. Sin duda son buenos porcentajes, pero en contraparte, el 27 y 24 por ciento restantes, respectivamente, significan millones de personas que continúan sin hacer caso de esta recomendación vital.

¿Será que no tienen miedo, que son irresponsables, que no creen que en realidad exista el coronavirus, que piensan que los medios de comunicación exageran? Es posible que sí, pero también es un hecho que la gran mayoría que sigue saliendo a calle lo hace por necesidad, ya sea porque su empresa se los exige o porque son sus propios patrones y tienen que salir para ganarse el sustento diario.

Una encuesta realizada por Consulta Mitofsky: 'El coronavirus en México', muestra que el 31 de enero pasado, 34.9 por ciento de los encuestados manifestó tener poco o nada de miedo de contagiarse (hay que recordar que el primer caso en nuestro país se detectó el 28 de febrero). Esta percepción alcanzó 46 por ciento el 22 de febrero, pero después fue declinando hasta llegar a 21 por ciento hace cinco días.

Visto al revés, a finales de enero sólo 43.9 por ciento afirmó tener algo o mucho miedo de contagiarse, cifra que el 12 de abril alcanzó 77.1 por ciento.

Después hicieron una pregunta más fuerte: "¿Qué tanto miedo tiene de morir a causa del coronavirus?". El 8 de marzo, 62.5 por ciento respondió que poco o nada, declinando hasta 37 por ciento actualmente. Por su parte, 35.2 comenzó con mucho o algo de miedo, porcentaje que hoy llega a 59.4 por ciento.

Si, de acuerdo con esta encuesta, más de la tercera parte no muestra temor, quizás esto se deba, entre otras causas, a que la enfermedad no los ha tocado de cerca y los contagiados o fallecidos por este virus le son lejanos, como simples números en las estadísticas que todos los días actualizan en la televisión.

Al respecto, también se les preguntó a los encuestados, aunque no sobre el hecho concreto de conocer a alguien infectado con Covid-19, sino sobre una mera percepción: "¿Cree que ya hay personas infectadas de coronavirus cerca de su entorno o por lugares donde se mueve?". El 28 de febrero —conocido como 'día cero' para nuestro país— 81.8 por ciento contestó que no, número que al 12 de abril bajó a 41 por ciento.

Esta crisis sanitaria que estamos sufriendo lleva ya cincuenta días de haber iniciado en México y obvio es que la tendencia de las respuestas ha ido cambiando significativamente, en dirección a un mayor temor de ser contagiado. Los datos oficiales hasta esta mañana informan que tenemos seis mil 297 casos confirmados y doce mil 340 sospechosos de estar enfermos, en tanto que la defunciones suman 486.

Ayer, el gobierno dio sus nuevas proyecciones: si no se hubieran tomado las medidas necesarias e insistido en el confinamiento y la sana distancia, el pico muy alto de enfermos se habría alcanzado el 25 de abril, superando la capacidad hospitalaria para atender a todos, y la crisis habría terminado en la semana del 6 de junio próximo; pero hoy las autoridades confían en que gracias a las medidas implementadas, el pico, mucho más bajo, se alcanzará en la semana del 23 de mayo, para concluir la epidemia al inicio de agosto.

El camino será más largo, pero permitirá un combate más eficaz a la pandemia. No obstante, la mejor noticia es que el confinamiento finalizará el 30 de mayo y en las zonas de baja transmisión podría levantarse el 17 de mayo, pero en ambos casos manteniendo las medidas de protección a quienes están en los grupos de riesgo.

Podemos pensar que aún se ve muy lejos el 30 de mayo, pero también podemos pensar que cada día que pase estará más cerca y que podemos llegar a la meta sanos, junto con nuestras familias. La fórmula no es tan complicada. Si tiene el privilegio de poder hacerlo, hágalo: quédese en casa. Si no le es posible, tome todas las precauciones y permanezca en casa el mayor tiempo que pueda.

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