Javier Murillo

Combatir el bullying escolar con IA ¡es posible!

En España se ha diseñado WhatsomApp, inteligencia artificial que mejora la convivencia en el aula.

En varias ocasiones se me ha preguntado en este espacio si la inteligencia artificial puede hacer algo para reducir la violencia o identificar el acoso escolar o bullying. El tema no es un asunto menor, porque 7 de cada 10 niños y niñas de primaria y secundaria en México sufren violencia escolar, lo que ubica al país el primer lugar de casos registrados, de acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Casi un 50 por ciento de la comunidad estudiantil de los niveles citados han registrado algún caso acto de violencia verbal, psicológica, física y a través de redes sociales.

En España se ha diseñado WhatsomApp, inteligencia artificial que mejora la convivencia en el aula. Seis colegios de Madrid, Asturias y País Vasco utilizan como prueba piloto una innovadora aplicación construida con trabajo de IBM Watson, donde un equipo de psicólogos, pedagogos e informáticos de la empresa española KIOAI, business partner de IBM, desarrollaron esta aplicación "antiacoso" escolar, que ya se está empleando con alumnos de entre 6 y 16 años.

El teléfono contra el acoso escolar del Ministerio de Educación atendió casi 13 mil llamadas entre noviembre de 2017 y octubre de 2018 . Ya sea físico o psicológico, el acoso escolar es un problema que afecta a jóvenes de todo el mundo y que la tecnología puede ayudar a reducir.

¿Cómo es WatsomApp? La aplicación proporciona un juego online que mezcla pruebas de habilidad con preguntas que ayudan a los niños a interiorizar valores como la tolerancia y la amistad. Por ejemplo: "¿Con quién de tu clase formarías un equipo para jugar a las cartas?". En esta parte de la aplicación se utiliza la tecnología Watson Natural Language Classifier (NLC) para la clasificación de palabras y textos. El robot analiza tanto el lenguaje como el tono con que hablan los alumnos para identificar sus emociones. Si está contento, si está angustiado o estresado. Luego, realiza un informe confidencial en el que se identifican probables problemas como un bajo rendimiento en clase, o posibles actos de violencia contra el alumno o alumna.

Es importante subrayar que no recoge información confidencial y todos los datos se almacenan en un sistema protegido con encriptación de principio a fin. Los profesores analizan el informe con el resto de los expertos de las escuelas y ponen en marcha un plan a la medida de las necesidades.

El sentido de este avance tecnológico es generar un ambiente en el colegio en el que los chicos se sientan más cómodos y abiertos a sincerarse. El robot es empático, no emite juicios de valor y facilita un ambiente de confianza en el que los niños y niñas se abren más a expresar sus sentimientos. Pero al igual que otros aspectos de la educación, desde el hogar se debe realizar el primer monitoreo e identificar las primeras señales si algo anda mal con nuestros hijos en la escuela. La inteligencia artificial nunca sustituirá la responsabilidad de los padres.

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