Moneda en el Aire

¿Se avecina el fracaso de El Buen Fin?

Las esperanzas están puestas en que la confianza de los consumidores se mantenga.

El fin de semana del 15 al 18 de noviembre se realizará una edición más de El Buen Fin en donde principalmente comercios e instituciones bancarias han realizado intensas campañas de promociones para activar la economía en estas fechas e incluso a los burócratas se les adelanta una parte de su aguinaldo.

En el caso de los bancos, en los últimos años han tenido durante ese evento muchas más transacciones que incluso en algunos fines de semana de diciembre que es tradicionalmente el mes en que se disparan las ventas con plásticos, por lo que llegaron a ver ciertos beneficios de este programa que nació de la idea del 'Viernes Negro' de Estados Unidos previo a la época decembrina.

Sin embargo, ahora las alertas están prendidas. Por un lado si bien ya están listos los bancos con las tradicionales promociones de meses sin intereses, es un hecho que desde octubre de este año las ventas con tarjetas de crédito se han frenado prácticamente, y ha sido tan brusco que no se lo esperaban, confiesan algunos directivos de tarjetas, ya que todo el año habían venido utilizándose razonablemente bien.

El hecho es que hay preocupación de que si la tendencia de este mes de octubre continúa, este Buen Fin no sea lo que se esperaba y si se le suman los malos datos económicos que se dieron a conocer en estos días, el panorama, reconocen algunos directivos, no es del todo alentador, por el contrario, es preocupante para la industria, pero por el lado de los tarjetahabientes al ser cada vez más totaleros se ven menos problemas para ellos.

Lo que es un hecho es que si se mantienen los números de octubre en el uso de los plásticos y se incrementan los temores de que 2019 cerrará mal y 2020 tendrá un mal inicio, el programa comercial podría ser un fracaso. Las esperanzas están puestas en que la confianza de los consumidores se mantenga y aunque sea poco, gasten, quizá no al ritmo de otros años, pero sí lo suficiente para que El Buen Fin sobreviva.

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Y bueno, aquí varias moneditas. Respecto al tema de Culiacán, como todos saben el día después los negocios no abrieron incluyendo las entidades financieras como bancos. Si bien hay que aplaudir que se cuidó el bienestar de sus trabajadores y clientes, para cerrar se requieren ciertas autorizaciones, ya que hay un calendario anual que marca que días no habrá operaciones financieras, y cuando han cerrado fuera de este calendario es porque hay algún desastre natural o de manera preventiva ante un hecho de este tipo, para eso se emiten disposiciones que protegen a los usuarios por no poder pagar ese día algún vencimiento de un crédito. Si bien había opciones electrónicas y de corresponsales bancarios, no todos tienen acceso a ello y siguen acudiendo a la sucursal a pagar. El hecho es que varias semanas después parece que a alguna autoridad se le 'olvidó' este detalle. Ya que hablamos de Culiacán, todo indica ya en la normalidad, al menos en pleno lunes restaurantes llenos de 'culichis' siguiendo su vida normal.

Mejor no pudo estar dicho por Luis Niño de Rivera, presidente de la Asociación de Bancos de México, quien recordó que el presidente prometió no subir impuestos, y con el aumento de la tasa de retención para los ahorradores que pasará del 0.46 por ciento en que lo dejó Peña Nieto a 1.46 por ciento en 2020 y que aseguran afectará a quienes ganan menos y no realizan declaraciones anuales porque terminarán pagando más impuestos. Pero lo que poco se dice y ya les platicaremos, es que si bien siguen en negociaciones y esperan hacer algún ajuste en las reglas de operación, ya veremos. Por lo pronto, la moneda está en el aire.

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