Continuamos inmersos en un entorno de exacerbada incertidumbre global. En este contexto, algunas inquietudes específicas ya dominan los titulares desde hace algunos días. En específico, ya ha comenzado la discusión respecto a la posibilidad de que los esfuerzos de política monetaria en EU desemboquen en una recesión y si la inflación en ese país está cerca de comenzar una trayectoria de moderación. De manera similar, se discute acerca de la conveniencia y efectos asociados a políticas de control de precios tales como subsidios o acuerdos para contener los precios de una canasta de bienes y servicios, la restricción de exportaciones o la desgravación de importaciones. Todo lo anterior con la intensión de contribuir al control de la inflación al consumidor. En México también emergen preguntas populares y se plantean escenarios diversos. No obstante, creo que algunas de estas interrogantes son factibles de ser pulidas hacia preguntas más relevantes y trascendentales. A continuación, tres apuntes.
¿Está próximo un incremento de 75 puntos base sobre la tasa de referencia de política monetaria de Banxico? En particular, tomando en cuenta las fluidas condiciones que afectan a los principales elementos que determinan las decisiones de Banxico, creo mas relevante preguntarnos si un cambio de ritmo en el ajuste de política monetaria debería interpretarse como un ciclo restrictivo más agresivo por delante o simplemente más veloz en su trayectoria hacia un nivel previamente identificado como terminal.
Más aún, la magnitud de los incrementos próximos no debería evaluarse solamente en términos nominales. Dada la trayectoria al alza de las expectativas de inflación de corto y mediano plazos, la magnitud de los incrementos nominales ha sido casi del doble que los reales. Es decir, por cada dos pasos que ha dado Banxico en términos nominales, solo ha dado uno en reales.
¿Está cerca un punto de inflexión para la inflación? Esto es: ¿se encuentra próximo el día en que podremos decir que las presiones inflacionarias al alza han comenzado a diluirse? Dado que el choque o conjunto de choques que han venido presionando los precios al consumidor al alza todavía se encuentra en evolución, creo más relevante el preguntarnos sobre qué es lo que deberíamos observar antes de considerar que la inflación ha alcanzado su punto máximo.
En este sentido, creo que primeramente deberíamos ver consolidarse una menor presión en los precios de las materias primas a nivel internacional, producto de un agotamiento en sus fuentes relacionadas con el funcionamiento de las redes globales de proveeduría, el relajamiento en los cuellos de botella logísticos y señales alentadoras y creíbles de una distensión en la guerra entre Rusia y Ucrania.
Una vez constatado lo anterior, deberíamos ser todavía pacientes mientras que la inflación ‘en las tuberías’ es purgada por los productores. Así, aconsejo tener presente que ‘una golondrina no hace verano’ y, por ende, uno o dos datos de inflación no serían suficientes para proclamar el principio del fin de trayectoria de inflación al alza.
¿Debe Banxico seguir a la Fed en su ajuste monetario en tiempo y magnitud? Aunque la anterior es una pregunta popular, considero todavía más relevante el preguntarnos cómo y cuándo Banxico tendría que desacoplarse de la Fed. El contexto es claro, EU inicia su ciclo de ajuste en condiciones monetarias desde una zona probablemente mas laxa y con un ciclo económico en mejor posición en términos relativos respecto a México. En tal sentido, es lógico anticipar que el esfuerzo monetario necesario no debería ser igual en ambos lados del río Bravo. El reto sin duda estará en la forma en que se operaría un desacoplamiento desde México dadas las potenciales y adversas implicaciones sobre el diferencial de tasas de interés y el funcionamiento de los mercados financieros locales.
Hasta aquí tres ejemplos que llaman a afinar las interrogantes más relevantes que deberían, en mi opinión, plantearse los participantes en los mercados financieros.
Joel Virgen es economista del sector financiero con sede en Nueva York, EU. Sus opiniones son a título propio.