Si trabajan en un corporativo grande, quizás internacional, lo habrán notado. Una vez que han llegado a los puestos directivos, abundan los acentos internacionales.
Hay un tufillo a rezago en nuestro currículum nacional que obliga a las compañías a buscar talento de afuera para ciertas tareas. No hay suficiente en casa.
Va un ejemplo. Estamos lejos del liderazgo de la inteligencia artificial en nuestro barrio. Solo en ese rubro, Chile, Brasil, Uruguay, Argentina y Colombia están antes de nosotros en un índice de Latinoamérica.
El Índice Latinoamericano de Inteligencia Artificial (ILIA) elaborado por organismos como la CEPAL y expertos en la materia, ubica a México en la sexta posición dentro de un subcontinente que, seamos francos, no es el más avanzado en esa práctica.
Marcelo Ebrard llevará unas horas como secretario de Economía para cuando ustedes lean este texto y entre sus tareas prioritarias está precisamente una actualización del inventario nacional de cerebros.
Tiene cuatro objetivos y es el cuarto en el que puede dejar un legado con su firma. Conviene anotar su lista de misiones.
Uno. Renegociar el tratado de libre comercio norteamericano, el TMEC. Dos, promover inversiones para reducir importaciones provenientes de países como Taiwán, China, Malasia y Vietnam. Tres, recuperar la narrativa del nearshoring, que para fines prácticos es impulsar de nuevo la vieja maquila; y finalmente, lo más difícil de explicar, pero lo más importante: aumentar la tecnología y el valor agregado de lo que producen los mexicanos.
No es lo mismo vender pedazos de motor, que servicios globales de ciberseguridad. El margen de negocio es mucho más alto en el servicio de protección.
Ebrard no empezará de cero. Durante el último día de la gestión del presidente Andrés Manuel López Obrador, la Secretaría de Economía divulgó este lunes un documento que estará sobre su nuevo escritorio.
Es una versión mejorada de un inventario de todos los estudiantes que conozcan en este país. Incluye también el plan de ‘remodelación’ de nuestras habilidades.
A este dossier le llaman El Poder del Talento Mexicano: Transformando Regiones. Ésa es la clave. “¿Cómo nos transformamos?”, se llama su capítulo clave.
Existe una dosis de urgencia ante el envejecimiento de la población que menciona el mismo documento.
Los problemas que hoy enfrentan Japón o China, con una reducción de su población, ya están a unos 25 años de distancia para México. Para entonces los millennial serán ancianos y necesitan de gente joven que se prepare hoy para que el país no sea pobre en esos días en los que muchos querrán una pensión.
Así lo explica la Secretaría de Economía: “Por esta razón, es necesario aprovechar y potenciar las capacidades del talento mexicano que está en edad de estudiar y, al mismo tiempo, generar las oportunidades laborales que respondan a la realidad nacional que permitan el crecimiento económico dentro de un ambiente de derechos que impulse el bienestar social y la igualdad en todos los grupos de población”.
Por eso, el gobierno impulsa una nueva orientación de las preparatorias y universidades.
La Secretaría de Economía tiene registro de 18 carreras técnicas a nivel medio superior con rediseño curricular.
Ahora incluyen opciones de entrenamiento en ciberseguridad, inteligencia artificial, electromovilidad, biónica, robótica y aeronáutica.
La institución superior más grande del país, el Tecnológico Nacional de México (TecNM) graduó en 2023 más de 46 mil ingenieros. Hoy sus filas cuentan 509 mil 119 estudiantes precisamente en programas de ingeniería, de los cuales, el 40 por ciento son mujeres.
¿Qué están estudiando? Carreras que incluyen ingeniería en semiconductores; en ciencia de datos; en ciberseguridad, en inteligencia artificial, y en desarrollo de aplicaciones.