Traten de regresar a 2016... a esas amenazas del presidente Donald Trump cuando inició su mandato. ¿Recuerdan quién lo detuvo cuando quiso acabar sus tratos comerciales con México? probablemente, no.
Ellos muy probablemente pagan y operan la maquinaria de cabildeo más poderosa de Estados Unidos. Cuando el mandatario arribó, le pidieron una dramática reducción de impuestos y la obtuvieron, luego le solicitaron que en lugar de acabar con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), éste fuese mejorado. Ahí tienen el nuevo Tratado México Estados Unidos y Canadá (TMEC).
Hoy, ellos muestran apoyos hacia el partido político de Joe Biden, lo que cimbró este verano las bases de la organización.
Estos personajes son los miembros de la US Chamber of Commerce, dirigida por Tom Donohue, bien conocido por el presidente Andrés Manuel López Obrador, con quien cruzó abrazos en Yucatán el año pasado en una reunión binacional.
"La US Chamber of Commerce está preparada para respaldar a casi dos docenas de demócratas de la Cámara (de Representantes) para la reelección, lo que desencadenó una revuelta dentro de la organización de derecha y provocó un fuerte rechazo de los poderosos donantes republicanos del grupo", divulgó Político, un relevante medio estadounidense.
"La decisión representa un cambio radical para este gremio tradicionalmente conservador, que ha gastado más de 100 millones de dólares respaldando a candidatos republicanos durante la última década", añadió el artículo firmado por el periodista Alex Isenstadt.
Tres meses antes, el Washington Post había publicado que tanto Donohue como la presidenta del organismo, Suzanne Clark, comunicaron que al iniciar la campaña para 2020, la US Chamber of Commerce apoyaría a más candidatos demócratas en la Cámara de Representantes que en ciclos anteriores. Sobre aviso no hay engaño… y van dos.
Por eso el giro hacia el Partido Demócrata motivó reacciones como la de los miembros de Oklahoma que contribuyen con esa organización. Ese estado aporta una producción aproximada de 500 mil barriles diarios de crudo a Estados Unidos, la nación con la mayor producción petrolera del mundo.
Chad Warmington, presidente de la cámara local, se encargó de divulgar lo que perciben incómodo en el viraje gremial: que los demócratas no actúan en favor de la industria de hidrocarburos.
Las críticas a esa intención se centran en Kendra Horn, legisladora de ese partido por Oklahoma, que votó en contra de perforaciones petroleras en reservas naturales y en las costas del Pacífico y el Atlántico estadounidenses. Ella podría estar entre los beneficiarios de los apoyos.
Los líderes de la US Chamber deben decidir entre respaldar al actual presidente que aparentemente ha cedido a sus peticiones, pero sembró incertidumbre en el comercio mundial, o apuntalar a Biden, quien se inclina decididamente por apoyar, entre otras actividades, la inversión en la generación de electricidad con el sol y el viento.
Esa agenda es más poderosa de lo que solía ser a decir de la evidencia, pues ahora responde a la lógica del mercado.
"El valor promedio de los envíos de módulos solares fotovoltaicos, una aproximación del precio, disminuyó de 3.50 dólares por watt pico en 2006 a 40 centavos por watt pico en 2019", expuso la Agencia de Información Energética estadounidense en un reporte de agosto.
Uno de los principales promotores de esa dinámica, Elon Musk, fundador de Tesla, ayer trepó al tercer lugar en la lista de multimillonarios de Bloomberg, desplazando a Mark Zuckerberg, de Facebook.
Un análisis de los ingleses de The Economist, reveló ayer que Biden tiene seis de siete posibilidades de ganar el colegio electoral en las elecciones del 3 de noviembre. Los mexicanos deben calcular bien sus movimientos diplomáticos en lo que resta del año, acercarse a la US Chamber parece un paso inicial acertado y pueden hacerlo los empresarios por su cuenta.