AMLO declaró que el único acto de corrupción durante el gobierno fue un faltante de dos mil 700 millones en la empresa estatal Segalmex, antes Conasupo, y que los responsables ya están en la cárcel.
La auditoría realizada por la Auditoría Superior de la Federación a Segalmex en 2022 dejó claro que la suma sin aclarar en esa empresa paraestatal alcanza los 15 mil millones de pesos, no la cantidad que dio a conocer AMLO.
No solo en esa empresa hubo dinero sin conocerse su destino. La ASF señaló que en varias paraestatales y dependencias del gobierno federal hay gastos sin aclarar.
Según las cifras dadas a conocer por la ASF, además de los 15 mil faltantes en Segalmex, se detectó que hay millones sin un destino claro en:
El Tren Maya, 785 millones.
Pemex, 799 millones.
Refinería de Tula, 62 millones.
Refinería de Dos Bocas, 110 millones.
CFE comunicaciones, 121 millones.
Gobernadores Morena, 12 millones.
Alcaldesas de la CDMX, 407 millones.
Aeropuerto Felipe Ángeles, 14 millones.
En esas nueve dependencias paraestatales hay un total de 32 mil millones de pesos faltantes hasta el 2022.
Datos tomados de mi libro “Gobernantes ricos, pueblo pobre”, disponible en Amazon.
Del 2023 y del 2024 no hay todavía resultados sobre gastos sin aclarar de la Auditoría Superior de la Federación, la cual parece que la ‘congelaron’.
A la fecha (6/9/2024) no encontré nuevos resultados de auditorías de la ASF al sector público federal. Solo algunas auditorías en municipios, pero no del gobierno federal. Pareciera que a la ASF le impiden realizar auditorías en los dos últimos años del gobierno de AMLO.
Lo correcto del gobierno de Claudia Sheinbaum, que en poco tiempo tomará el poder, es que le pida a la Auditoría Superior de la Federación que realice, con independencia y autonomía, sin recortar o esconder resultados, auditorías del destino de los millones que gastó el gobierno federal en todas sus dependencias y empresas estatales en 2023 y el primer semestre de 2024. Si no lo hace y afloran después desvíos, consideraran a Sheinbaum cómplice si hay faltantes.
El gobierno de Claudia no solo es responsable de lo que suceda en su gobierno, también de los desvíos que oculte en los últimos años del gobierno anterior.
Es una omisión no investigar, vía ASF, si hubo o no desvíos de millones en los dos últimos años de AMLO, y considerarse solo responsable de lo que haga de cuando llegue al poder en adelante. No debe ser tapadera de las anomalías en el gasto de sus compañeros de partido el sexenio pasado.