El gobernador republicano de Florida, y contrincante de Donald Trump para 2024, Ron DeSantis, ha propuesto una legislación para evitar la implementación de una moneda digital del banco central (CBDC) por parte del gobierno federal en su estado. Sin embargo, es poco probable que tenga éxito.
Las CBDC, por sus siglas en inglés (Central Bank Digital Currencies), son monedas digitales emitidas por los bancos centrales de los países en respuesta a las criptomonedas. Su objetivo es ofrecer una alternativa digital al dinero en efectivo y mejorar la eficiencia de las transacciones. A diferencia de las criptomonedas, las CBDC están respaldadas por el banco central y su valor está vinculado a la moneda fiduciaria del país.
Para oponerse a esto, Ron DeSantis ha argumentado que las CBDC pueden permitir la vigilancia por parte del gobierno federal, lo que amenaza la privacidad individual y la libertad económica. Sin embargo, sus preocupaciones son comprensibles en cierto nivel. Dependiendo de cómo se diseñe técnicamente y se regule legalmente, una CBDC orientada al consumidor podría potencialmente acumular y almacenar grandes volúmenes de información personal sobre las compras diarias y los movimientos de las personas.
Es importante tener en cuenta que la tecnología de las CBDC puede tener beneficios significativos, como reducir el costo y aumentar la eficiencia en la transferencia de dinero. No obstante, es crucial garantizar que se protejan los derechos de privacidad de los usuarios. La politización de este tema puede retrasar la implementación de tecnologías financieras innovadoras y limitar la capacidad del gobierno para tomar medidas efectivas en caso de una crisis financiera.
El proyecto de ley de DeSantis politiza un tema que no necesita ser tan político. El presidente de la Fed, Jerome Powell, quien fue subsecretario del Tesoro bajo el presidente George H.W. Bush y fue nombrado presidente de la Fed por el presidente Trump, ha dado luz verde a cierta investigación sobre CBDC. No obstante, se necesitaría la autorización del Congreso y el apoyo público antes de que cualquier plan CBDC pueda avanzar. Incluso existe la noción de que el yerno de Trump, Jared Kushner, fue quien propuso la idea de un dólar digital durante la administración Trump.
En todo el mundo, 114 países que representan más de 95 por ciento del PIB global están explorando proyectos de CBDC, incluidos 18 países del Grupo de los 20 (G-20), según el Atlantic Council. Los últimos esfuerzos de CBDC de la administración Biden están, en cierto sentido, alcanzando lo que otras naciones ya están haciendo.
Aún no está claro si el gobierno de EU, bajo cualquier partido político, adoptará una CBDC orientada al consumidor en lugar de centrarse en mejorar la tecnología para transferencias bancarias, conocido como “CBDC mayorista”. Sería curioso ver cómo los CBDC, una tecnología que la Fed ni siquiera ha desarrollado sólidamente, se convierten en un tema popular para una campaña presidencial nacional.