Nos encontramos a pocas semanas de cambiar el rumbo político de Zapopan y Jalisco. La emoción es palpable: está en las propuestas que nos transmiten para mejorar sus colonias las y los vecinos en las reuniones que tenemos en las colonias del municipio; se ve en el ánimo de las personas que nos piden una calcomanía para su carro y en las sonrisas de nuestros militantes y voluntarios a pesar del sol y del cansancio; está en las miles de personas que de manera libre asisten a los eventos que hemos organizado durante este proceso electoral para demostrar la fuerza de nuestra coalición; pero, sobre todo, se sienten las muestras de cariño cotidiano y espontáneo que nos han dado las y los zapopanos. En este punto, no puedo dejar de mencionar a Roshelle, una niña zapopana que hace par de días me entregó una carta en la que me decía “ánimo, porque vamos a ganar”. ¿De dónde viene nuestro optimismo?
El buen ánimo está de nuestro lado y nuestros adversarios están irritados. Sienten amenazados sus privilegios y sus negocios. Por eso, han emprendido una guerra sucia por varios frentes en contra de nuestra coalición; una guerra que les ha costado millones de pesos y que, seguramente, está financiada con los recursos de sus negocios disfrazados de políticas a favor de las personas, como la verificación vehicular. Para crear una falsa percepción de que su movimiento va a la cabeza en las preferencias electorales, han decidido atacarnos por medio de redes sociales, difundiendo mentiras a través de cuentas falsas, también conocidas como bots. Además, han emprendido un frente a pie de tierra, en donde han tomado acciones como la destrucción de nuestra publicidad legalmente colocada.
Su desesperación es notoria. Han abusado de los servidores públicos de los municipios en donde gobiernan, y los han obligado a ir a eventos proselitistas a cambio de conservar sus empleos. Ya hay varios trabajadores que, por alzar la voz, han sido suspendidos de sus actividades. A ellas y a ellos les digo, no están solos. El abuso de lo público para beneficiar a los privados ha sido su modo de gobernar. Por eso, los candidatos de MC no quieren debatir, confrontar ideas, y dar la cara a la ciudadanía por sus desaciertos, como la desaparición de 300 millones de pesos en el Banco Accendo.
Sin embargo, las conversaciones que hemos mantenido con las y los zapopanos demuestran que sus ataques y abusos no han tenido los efectos que esperaban. El ánimo de cambio es un sentimiento generalizado; pertenece a la mayoría de las y los zapopanos, y se refleja en diferentes estudios demoscópicos dirigidos por casas encuestadoras de prestigio y que nos posicionan en el primer lugar para ganar la alcaldía de Zapopan rumbo a las elecciones de este 2 de junio. La mejor defensa contra la guerra sucia viene de la realidad, que por más que quieran no podrán torcer: MC y sus candidatos y candidatas saben que años de gobiernos corruptos, mediocres e insensibles están pasando factura.
Este 2 de junio estará marcado por muchas primeras veces. Será el primer triunfo electoral de esta fuerza política y será en uno de los municipios más grandes de México; será el primer triunfo de una fuerza política que dio sus primeros pasos hace más diez años; una fuerza política que pone a las preocupaciones de las personas al centro de su agenda. Zapopan va a ser un municipio seguro, protegido por la mejor policía del país, con más elementos, con mejores condiciones laborales, con más tecnología y con una mejor preparación. En Zapopan, no volverá a pasar un caso como el de los 300 millones que desaparecieron del presupuesto municipal. En Zapopan los servicios públicos van a llegar a todos los rincones del municipio y a todas las personas.
Tendremos un mejor futuro, lo sé, lo vamos a lograr. Vamos a ganar.