Plaza Viva

La generosidad hecha comedia

Alex Fernández demuestro que la comedia sí puede ser “un asunto peligroso” en el mejor de los sentidos: puede sacarnos de nuestro letargo sensorial.

"Fue en ese momento en que me di cuenta

que la comedia es un asunto peligroso" .

Terry Jones (1942-2020)

Enero tiene fama de ser una época del año especialmente difícil y cruda en lo que se refiere al estado de ánimo. Hay quienes dicen que esto se debe a que apenas nos estamos acostumbrando a las nuevas rutinas, a que el clima está particularmente frío o a que los días son más cortos y se reduce nuestra dotación de luz solar. Seguro también influye el hecho de que las festividades han concluido y con el arranque de año se vuelve impostergable enfrentar esos compromisos, planes, cuotas, kilos o mudanzas.

Incluso a este arranque anual le han inventado una celebración infame. Al tercer lunes de enero lo han llamado 'el día más triste del año', lo cual científicamente ha sido probado erróneo pero comercialmente logró su cometido de vender más helado de chocolate y vuelos a la playa.

Sea cualquiera de las razones, lo importante es que en el arranque de 2020 podrían haber muchos motivos para sentir ansiedad, depresión, soledad o incluso vacío. Puede ser que encontremos consuelo al enfrentar una a una las preocupaciones, o al ir a terapia o haciendo ejercicio. Pero, sumado a estos consejos, creo que es fundamental hacer algo que parece "un asunto peligroso" en nuestros tiempos: regalar risa y generosidad a la vida.

Todos estos elementos son preciados y poco abundantes en nuestro entorno cotidiano. Vivimos en una época en la que las redes sociales invitan al insulto, la patanería y la bajeza o, cuando no, a la vanidad, el consumismo, la ostentación y la superficialidad. Andamos conectados y perdidos.

Por todas estas razones da gusto que en este mes que dicen que es el más triste, en este entorno de crispación, en estos días donde se olvida la generosidad y la sensibilidad, se haya estrenado una pieza que logra enfrentar todo esto en menos de una hora: el especial "El mejor comediante del mundo" de Alex Fernández.

El título de esta producción podría parecer, a la lejanía, una presunción o un deseo por provocar polémica entre la audiencia; sin embargo, quienes lo hemos visto podemos dar fe de que se trata de todo lo opuesto: un homenaje al ser amado, una confesión de aquellas que cimbran, la generosidad hecha comedia.

Tuve la oportunidad de ver esta misma rutina en Guadalajara, en un teatro a reventar, en donde las más de mil personas que asistimos quedamos pasmadas y descolocadas al terminar la presentación. ¿Habíamos dejado salir unas lagrimitas en un viernes por la noche junto a otras personas en un show de comedia? Sí, eso fue justo lo que sucedió y fue una experiencia maravillosa.

Alex demuestra con este especial que la comedia sí puede ser "un asunto peligroso" en el mejor de los sentidos: puede sacarnos de nuestro letargo sensorial, puede recordar a quien se ama, puede desenmarañar lo difícil que es crecer y puede curar.

Hay que celebrar este tipo de atinos, los motivos sobran. Vale la pena regalarse una hora para disfrutar de esta gran propuesta de Alex y constatar que realmente es "el mejor comediante del mundo".

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