Un polímero, en su definición más simple, es una sustancia química hecha de muchos componentes. Entre esas unidades básicas está formada con carbono e hidrógeno y a veces de oxígeno, nitrógeno, azufre, cloro, flúor, fósforo y silicio.
Al considerar todos los atributos de los polímeros es igualmente importante analizar algunos de los desafíos asociados con los objetos que los utilizan. La mayoría de los plásticos de botellas se deterioran con el sol pero nunca se descomponen completamente cuando están enterrados en vertederos. Sin embargo, otros materiales como el vidrio, el papel o el aluminio tampoco se descomponen fácilmente en los vertederos. Algunos bioplásticos se descomponen en dióxido de carbono y agua en instalaciones de compostaje (descomposición bioquímica) especialmente diseñadas. No se biodegradan en otras circunstancias.
A partir de 2005 la caracterización de residuos sólidos municipales antes de reciclar en EU mostró que los plásticos constituían el 11.8 por ciento de la basura en peso en comparación con el papel, que constituía el 34.2 por ciento. El vidrio y los metales representaban el 12.8 por ciento en peso. Los desechos de jardín constituyeron el 13.1 por ciento de los residuos sólidos en peso. Los desperdicios de comida formaron el 11.9 por ciento de los desechos sólidos.
Las características de los polímeros que hacen que sean tan atractivos y útiles, livianos y con formas físicas casi ilimitadas, ocasionan que el reciclaje post-consumidor sea un desafío. Cuando se reúnen suficientes elementos plásticos usados, las empresas deben desarrollar tecnología para reciclarlos. La tasa de reciclaje de todos los plásticos no es tan alta como se quisiera. Pero, la tasa de reciclaje de 526,500,000 de Kg. de botellas de poliéster, 23.1%, reciclada y 429,000,000 de Kg. de botellas de polietileno de alta densidad, 28.8%, recicladas muestra que cuando la masa crítica de material está disponible, el reciclaje puede ser un éxito comercial.
Los usos para plásticos reciclados crecen todos los días. Los plásticos reciclados se pueden mezclar con plástico que no se ha procesado antes, sin sacrificar sus propiedades en muchos usos. Los plásticos reciclados se utilizan para fabricar maderas poliméricas para mesas de picnic, cercas y parques infantiles, lo que proporciona bajo mantenimiento, productos sin astillas y ahorro de madera natural. El plástico de los refrescos y las botellas de agua se puede hilar en fibra para la producción de alfombras o en nuevas botellas de alimentos. Algunas veces el uso más valioso para un plástico reciclado es en una aplicación diferente al uso original.
Una opción para los plásticos que no se reciclan, especialmente los que están sucios, como la envoltura de alimentos usados o los pañales, puede ser un sistema de conversión de residuos en energía WTE, a base de residuos. En 2005, el 13.6% de los residuos sólidos municipales de EU se procesaron en sistemas WTE. Cuando se decide utilizar sistemas de conversión de residuos en energía para procesar los desechos sólidos, los plásticos pueden ser un componente útil.