Dinero, Fondos y Valores

¿Evitará México un traspié financiero?

El proceso de normalización monetaria en EU podría presionar al tipo de cambio y afectar los flujos de capital, que podrían registrar mayores salidas.

En días recientes la presión sobre el tipo de cambio aumentó y el lunes, previo al feriado bancario de ayer, cerró en 20.82 pesos por dólar, su máximo de tres semanas, de acuerdo con datos del Banco de México.

Pero durante la sesión de este martes, el dólar llegó a cotizar en 20.91 pesos en operaciones internacionales, el nivel más alto en más de siete meses.

La depreciación de la moneda mexicana, de 3.2 por ciento en sólo cinco jornadas, está asociada sobre todo al inminente inicio del proceso de normalización monetaria en Estados Unidos.

En su reunión de esta semana, que concluye hoy al mediodía, la Reserva Federal mantendrá sin cambio su rango objetivo de entre 0.0 y 0.25 por ciento para la tasa de interés de Fondos Federales, según las expectativas de los analistas.

Lo importante será el anuncio sobre el inicio de un proceso de reducción gradual de las compras de activos (tapering) que concluirá el próximo año.

La Fed ha mantenido sin cambio su programa de compra de activos en 120 mil millones de dólares al mes, como parte de las medidas de estímulo monetario implementadas en EU para inyectar liquidez a la economía tras la llegada de la pandemia.

En las principales economías avanzadas, los bancos centrales han mantenido el estímulo monetario, pero algunos ya empezaron a disminuirlo ante el panorama de mayor inflación global, que parece ser más que transitoria.

En la economía estadounidense cada vez hay más incertidumbre sobre el momento en el que las presiones ‘temporales’ en los precios comenzarán a relajarse.

De hecho, se espera que, además de que empiece la moderación del estímulo monetario a la economía, la Fed reconozca que las presiones inflacionarias son más severas y menos transitorias que lo previsto.

Aunque una reducción en el ritmo de compras de activos podría estar justificada por las presiones inflacionarias en EU, el tapering ya es esperado por el mercado.

La Fed podría anunciar hoy un ajuste al volumen en que provee dinero a la economía de al menos 15 mil millones de dólares mensuales.

Si se confirma el inicio del tapering a razón del monto señalado, este programa concluiría de manera progresiva a mediados de 2022.

El proceso debe ser ordenado y transparente para evitar episodios de volatilidad o, peor aún, de pánico en el mercado, como ocurrió en abril de 2013, cuando se dio una sobrerreacción a la inesperada retirada de los estímulos.

Ante ese fenómeno conocido como taper tantrum, hace ocho años hubo un aumento en los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense y un fortalecimiento generalizado del dólar ante la mayoría de monedas en el mundo, incluido el peso mexicano.

El inicio de la reducción en la compra de activos es el paso previo a un alza en la tasa de interés de la Fed y la primera señal de un endurecimiento de la política monetaria en EU.

Tanto el mercado como la mayoría de los miembros del Comité Federal del Mercado Abierto de la Fed esperan que el primer incremento en la tasa de Fondos Federales se dé en 2023.

Sin embargo, algunos miembros del Comité anticipan la primera alza de un cuarto de punto para finales de 2022.

Lo que hará ahora el Banco Central de EU es aflojar el agresivo plan de estímulo monetario, pero no subir aún la tasa de referencia.

¿Por qué es importante para México lo que anuncie hoy la Fed?

El proceso de normalización monetaria en EU podría presionar al tipo de cambio del peso y afectar los flujos de capital, que podrían registrar mayores salidas del país a las observadas hasta ahora.

La tenencia de bonos gubernamentales mexicanos por parte de inversionistas extranjeros sigue reduciéndose.

En lo que va del año ha habido salidas de capital foráneo en bonos emitidos por el gobierno de 268 mil 835 millones de pesos.

Las salidas en 2021 ya superan a las de todo 2020, cuando cerraron el año en un máximo histórico de 257 mil 239 millones de pesos.

Menores estímulos monetarios en EU pueden tener implicaciones negativas para el peso mexicano y los flujos de capital.

El ‘fantasma’ del taper tantrum ronda el mercado y no precisamente por el halloween.

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