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La ‘solidez’ de México se pondrá a prueba

La actividad económica acumuló seis trimestres de expansiones consecutivas y logró un crecimiento de 3.8 por ciento.

En términos de la situación económica, la semana y el mes cierran con buenas y no tan buenas noticias sobre México.

La mejor noticia es que en el periodo enero-marzo de 2023, la actividad económica en el país duplicó el ritmo de crecimiento del trimestre previo.

De acuerdo con la estimación oportuna del PIB, entre enero y marzo pasados la producción nacional aumentó 1.1 por ciento respecto al trimestre anterior, con lo que se ubicó por arriba del 0.8 por ciento previsto por el consenso de analistas.

Con los resultados anunciados por el INEGI, la actividad económica acumuló seis trimestres de expansiones consecutivas y logró un crecimiento de 3.8 por ciento en comparación con el periodo enero-marzo de 2022.

Los dos principales grupos de actividad económica mostraron crecimiento en el periodo reportado.

El PIB oportuno de las actividades secundarias o industriales avanzó 0.7 por ciento, pero el de las terciarias, representadas por el comercio y los servicios, repuntó un sorpresivo 1.5 por ciento en el primer trimestre de 2023.

Esto más que compensa la contracción de las actividades primarias, que son las del sector agropecuario, de 3.2 por ciento

Estos resultados muestran que, “gracias a la estabilidad y las reformas realizadas por el gobierno, la economía de México sigue creciendo y se encuentra totalmente sólida”.

Así lo dijo este viernes el subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, al presentar los Informes sobre la Situación Económica, las Finanzas Públicas y la Deuda Pública al primer trimestre de 2023.

“A pesar de los conflictos globales, México se está destacando de otros países o economías emergentes por su estabilidad económica, por sus equilibrios financieros, pero especialmente por la coherencia y prudencia fiscal reflejada en las finanzas públicas”, aseguró el funcionario.

Hasta antes de conocer los datos de la estimación oportuna del PIB, las expectativas de crecimiento para este año provenientes de las encuestas entre analistas se mantenían en torno a 1.6 por ciento.

Una vez que se publicó la estimación oportuna, que aún es información preliminar, pues la revisión de las cifras del PIB se publicará el 26 de mayo, algunos analistas coincidieron en que la economía mexicana apunta a crecer este año alrededor de 2 por ciento.

Es el caso de Invex, cuya estimación de crecimiento para el PIB de México en 2023 se ubica en 2 por ciento.

Su economista en jefe, Ricardo Aguilar, dijo a este reportero que “hemos analizado la cifra de manera muy cautelosa”, por lo que “no somos tan pesimistas como el consenso (…), pero tampoco somos tan optimistas como la autoridad, porque sí estamos viendo el impacto de una posible recesión en Estados Unidos”.

En Ve por Más decidieron revisar su proyección de crecimiento del PIB para 2023 de 0.8 a 1.9 por ciento ante la sorpresiva fuerza que mostró la economía mexicana al inicio del año.

“No obstante, la desaceleración global, una inflación aún elevada y el efecto rezagado del apretamiento monetario todavía soportan la expectativa de una desaceleración más clara en los próximos trimestres”, matizó.

De acuerdo con Banorte, los resultados oportunos “son consistentes con nuestra visión de un avance de 2 por ciento del PIB este año, mismo que reiteramos y que está por encima del consenso en 1.6 por ciento”.

Yorio dijo que en Hacienda siguen pensando que “el crecimiento va a estar muy cercano al 3 por ciento y, probablemente, los que sí van a tener que hacer ajustes en sus estimaciones de crecimiento son los analistas”.

La no tan buena noticia proviene de las estadísticas de finanzas públicas y deuda, señaladamente de los ingresos tributarios, que fueron inferiores en 41.3 mil millones de pesos a lo programado para el primer trimestre del año.

En su interior hubo contrastes entre las dos fuentes más importantes de ingresos no petroleros del gobierno, el ISR y el IVA.

Mientras la recaudación del ISR superó en 52 mil millones de pesos lo previsto en el programa, la del IVA quedó casi 77 mil millones por debajo de la meta trimestral.

Además, el costo financiero de la deuda superó lo programado en 14.1 mil millones de pesos debido a las mayores tasas de interés.

No es por alarmar, pero el aumento en el costo financiero, de 46.3 por ciento en términos reales –descontada la inflación– respecto al primer trimestre de 2022, puede ejercer presión sobre las cuentas fiscales y representar un riesgo para las finanzas públicas.

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