La mayoría de los analistas encuestados por Citibanamex el 5 de junio, justo hace una semana, anticipó una reducción en la tasa de referencia del Banco de México en su decisión de este mes.
El consenso proyectaba una baja de 25 puntos base en el anuncio del próximo 27 de junio para reducir la tasa de 11 a 10.75 por ciento.
Así lo anticiparon 20 de los 33 analistas encuestados por Citibanamex la semana pasada.
Las expectativas sobre la trayectoria de la tasa de referencia de Banxico han venido cambiando y ahora algunos analistas no incorporan movimiento alguno este mes.
En un entorno más complejo, dominado por el ruido político y la incertidumbre cambiaria, el banco de inversión Barclays considera que el Banco Central mexicano ya no podrá reducir su tasa de referencia este año.
Por su parte, el equipo de análisis económico de Banorte señaló que “bajo la coyuntura actual, ya no esperamos un recorte de 25 puntos base en junio”.
“Además, creemos que se extenderá el actuar gradual a lo que resta del año, ahora esperando la tasa en 10.50 por ciento al cierre de diciembre (contra un previo de 10 por ciento) considerando recortes de 25 puntos base en septiembre y diciembre”, abundó.
Este cambio de expectativas se produjo después de que el peso mexicano se vio afectado por los resultados de las elecciones para el Congreso federal, que dan a Morena y sus partidos aliados la mayoría calificada –dos tercios de los asientos– en la Cámara de Diputados y casi la mayoría calificada en el Senado.
Además del incremento en la volatilidad cambiaria, el peso amplificó su depreciación frente al dólar estadounidense en los últimos días al presentarse un episodio de elevada aversión al riesgo sobre México.
La cotización del peso mexicano frente al dólar se disparó desde la primera sesión posterior a la jornada electoral del 2 de junio.
La moneda nacional acumula una depreciación de casi 9 por ciento en las últimas siete sesiones, influida principalmente por el resultado de las elecciones al Congreso, que favorecen ampliamente a la coalición encabezada por Morena.
El peso es la moneda de peor desempeño frente al dólar en lo que va del periodo poselectoral. En específico, entre las 151 divisas a las que da seguimiento Bloomberg.
La composición que tendrán las cámaras a partir de septiembre con el inicio de la nueva legislatura allana el camino para la aprobación de reformas constitucionales percibidas como ‘poco amigables’ para los mercados, particularmente la del Poder Judicial.
En un análisis reciente, Citibanamex advirtió que los mercados financieros siguen reaccionando negativamente al aumento del riesgo político.
“De aprobarse, esas reformas conducirían al país por una senda de debilitamiento institucional, eliminarían controles y contrapesos, y avanzarían el proceso de centralización política”, perfiló.
Cabe recordar que en su reunión de marzo, el Banxico recortó por primera vez en más de tres años su tasa de referencia, lo hizo en 25 puntos base a un nivel de 11 por ciento.
Desde entonces, hubo miembros de la Junta de Gobierno que alertaron que ese ajuste a la baja en la tasa no implicaba el inicio de un ciclo de recortes.
Si bien la postura monetaria se mantiene restrictiva, la perspectiva de una pausa es adecuada para la reunión de al menos este mes, por lo que difícilmente el Banco Central realizará un ajuste adicional a la tasa.
Los niveles más altos del tipo de cambio respecto a los observados antes del proceso electoral pueden dar lugar a presiones sobre la inflación, que continúa por arriba de la meta de 3 por ciento anual, a la cual se espera que converja en el cuarto trimestre de 2025.
Por si algo faltara, los mercados globales siguen asimilando los resultados electorales en Europa, donde se abre un nuevo ciclo político con el auge de la derecha.
Además, están a la espera del anuncio de política monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos programado para hoy al mediodía.
Si, como se prevé, la Fed retrasa el primer recorte de tasas en EU hasta después de las elecciones presidenciales de noviembre, su narrativa aún restrictiva puede agregar presión al peso mexicano.