En los años recientes, el sector Fintech, integrado por las empresas que usan la tecnología para brindar servicios financieros –de donde viene su nombre–, ha cobrado relevancia en México. Muestra de ello fue el crecimiento de 14 por ciento durante 2019. De acuerdo con Finnovisa, hay 640 compañías en esta industria y generan alrededor de 60 mil empleos en el país. Su mayor presencia se encuentra en los segmentos de pagos y préstamos. Les sigue el que agrupa los préstamos al consumidor. También es una buena noticia que, conforme pasan los años, se ha reducido la tasa de empresas que dejan de operar. Este indicador pasó de 11 por ciento en 2018 a 4.5 por ciento en mayo de 2019, lo que puede interpretarse como una señal de fortalecimiento de la industria.
Por ubicación geográfica, la mayoría de estas empresas está instalada en la Ciudad de México (70 por ciento). Esto convierte a la capital del país en uno de los hubs fintech más importantes en Latinoamérica. Después se encuentran Monterrey y Guadalajara con 11.0 y 7.0 por ciento, respectivamente. No resulta raro que sean las principales zonas urbanas del país las que registran más compañías operando. Son también las que cuentan con mayor infraestructura, lo que posibilita el surgimiento de actividades relacionadas con la innovación tecnológica.
Durante los últimos meses, la pandemia de Covid-19 ha reconfigurado la manera en que nos relacionamos las personas, lo cual incluye las vías para ofrecer y adquirir bienes y servicios. En este contexto, se ha impulsado el uso de métodos de pago sin contacto o digitales. Así, la crisis sanitaria ha generado que la utilización de herramientas tecnológicas se incrementara exponencialmente en el último año. Un ejemplo de ello es el crecimiento de las empresas fintech, las cuales alcanzaron en seis meses lo que se tenía pronosticado para cinco años, según Legal Paradox. Sin embargo, en países como México, también se han acentuado las desigualdades estructurales y vuelve más visible la necesidad de acercar estos servicios a una población excluida en varios sentidos.
Por otra parte, si bien la crisis sanitaria ha permitido el auge de estas empresas, no estarán exentas de pruebas en el mediano y largo plazos. Para lograr su consolidación y continuar con la expansión de los meses recientes, tendrán que superar algunos retos, entre los que destacan: 1) retener a los usuarios que empezaron a usar estas plataformas a partir de la crisis sanitaria; 2) transmitir confianza y seguridad a sus clientes; 3) obtener financiamiento, que ha sido más complicado a raíz de la actual crisis económica global; 4) mejorar la educación financiera y digital; 5) convertirse en empresas que privilegien las estrategias data driven, y 6) fortalecer la ciberseguridad.
En este sentido y con el objetivo de analizar los desafíos y las oportunidades que se presentan en el sector, el 5 de febrero se realizará el Seminario de Perspectivas Empresariales Fintech en el ITAM, organizado por la Asociación de Ex Alumnos. La transmisión será online y puede inscribirse cualquier persona interesada. Destacan las participaciones de Agustín Carstens, gerente general del Banco de Pagos Internacionales; Javier Villamizar, operating partner de Softbank's Vision Fund; Amin Toufani, de Singularity University; Alehira Orozco, presidenta de la Asociación Fintech México; Laura Cruz Urquiza, CEO de Mastercard México, y Augusto Álvarez de Iturbe, presidente de AlphaCredit Capital. Habrá que estar atentos a sus intervenciones, seguramente darán mayor claridad sobre lo que se espera para las fintech.