Investigadores de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) encontraron ejemplares del moquito Aedes albopictus, conocido como mosquito tigre, en el municipio de Kanasín, que colinda al sureste de Mérida.
Dicho mosquito había sido detectado en la Península de Yucatán en 2011 en Quintana Roo, pero fue hasta 2017 cuando se registró su presencia en la entidad, en el municipio de Tizimín.
Este lunes, la Secretaría de Salud estatal (SSY) informó que los especialistas de la Unidad Colaborativa para Bioensayos Entomológicos (UCBE) de la UADY detectaron ejemplares de esta especie en un lote baldío con presencia de vegetación perturbada y criaderos, en un perímetro en cuyos alrededores existen negocios de chatarra, autopartes y potreros.
El responsable estatal del Programa de Vectores de la SSY, Jorge Alfredo Palacio Vargas, indicó que dicha especie, clasificada dentro del género Aedes, es también conocida como mosquito tigre por su agresividad y actividad, incluso durante el día. El mosquito está identificado como una especie que puede transmitir enfermedades como dengue, chikunguya y zika, de acuerdo con la Comisión Nacional de Biodiversidad.
"El especialista explicó que el mencionado insecto es de cuerpo pequeño, de alrededor de cinco a ocho milímetros, de color oscuro con escamas blancas plateadas que les dan a las patas un aspecto bandeado y una característica línea de color blanco plateado a lo largo del tórax y la cabeza, a diferencia del Aedes aegypti que tiene surcos en forma de guitarra. Asimismo, suele picar al atardecer y al amanecer", informó la dependencia en un comunicado.
De acuerdo con una publicación del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, la primera vez que se encontraron mosquitos de esta especie en la Península de Yucatán fue en 2011, en un cementerio de Cancún, Quintana Roo.
Mientras que en junio de 2017 se encontraron por primera vez en Yucatán, en el municipio de Tizimín, al nororiente de la entidad. Este reporte sería entonces el primero de su presencia en el centro de la entidad.
Palacio Vargas señaló que los ataques de este mosquito, considerado como un vector secundario, se dan cuando las hembras se desplazan para buscar hospedadores, aunque si una persona entra en terrenos de cría puede ser atacada en cualquier momento.
Los criaderos de sus larvas se pueden identificar en pequeñas acumulaciones de agua naturales como oquedades en árboles o grietas de rocas, y sitios artificiales como jarras, floreros, ceniceros, platos de macetas o sumideros de fuentes, así como espacios abiertos con plantas.
¿Qué hacer para prevenir un piquete?
Las autoridades de salud estatales llamaron a la población a adoptar medidas preventivas como el uso de repelente de insectos, así como insecticida doméstico en su domicilio, especialmente en baños, cuartos, zapateras y ropa sucia.
También llamó a limpiar los patios y evitar guardar cacharros y recipientes que pudieran acumular agua, donde podrían formarse reservorios para el mosco; igualmente, se recomienda colocar tela mosquitera en puertas y ventanas.