Con al menos 300 de los 1 mil 500 socios que tenía el 27 de diciembre de 2017, cuando suspendió operaciones en Cancún, la plataforma digital Uber se registró para volver a operar en la ciudad quintanarroense.
Uber inicia este proceso luego de que el 5 de diciembre un juez federal otorgara una suspensión definitiva a la aplicación de la reforma a la Ley de Movilidad local, la cual no permitía al transporte privado bajo demanda operar en la ciudad.
Aun cuando cuentan con amparos otorgados por la justicia federal que les permitirían reanudar operaciones, David Martínez, representante de Uber dijo que temen nuevas agresiones por parte de los socios del Sindicato de Taxistas "Andrés Quintana Roo", quienes no aceptan el regreso de Uber.
Asimismo, entrevistado para el noticiero matutino Origen, de la estación Acustik, Martínez señaló que la plataforma no puede apegarse a lo que establece la Ley de Movilidad "porque ya no sería Uber, sino otro tipo de formato".
"La gente está esperando el regreso de Uber, no sólo por el servicio, sino por la seguridad. No puede ser que operemos en Quintana Roo de una manera diferente a como lo hacemos en el resto de la República y en otros lugares del mundo", apuntó.
"No vamos a entrar ilegalmente, de modo que no tendríamos por qué tener problemas con los taxistas. Sin embargo, esperamos que, en caso de una agresión a los conductores de Uber, se apliquen sanciones fuertes a los taxistas", dijo el representante.
En la etapa anterior de Uber en Quintana Roo, dos personas murieron debido a las agresiones, sin que se detuviera a personas por los hechos.
El entrevistado señaló que ya se hizo un llamado a los socios para que actualicen sus documentos, tanto personales como los de sus vehículos y dijo que, a pesar de los amparos, no dejaron de trabajar con las autoridades del estado.
Los socios recibirán pláticas sobre seguridad para que sepan cómo actuar en caso de agresiones y proteger la integridad de sus pasajeros.