CIUDAD DE MÉXICO. Con la entrada en vigor de la reforma constitucional en materia de transparencia, partidos políticos tendrán que modificar su estructura administrativa con mayor intensidad en la competencia electoral y atender exigencias que sean solicitadas por los ciudadanos. "Que no serán pocas" dijo el presidente del INE, Lorenzo Córdova.
Tan solo mencionó que de 2003 al 2013, más de 27 mil solicitudes de información, es decir una de cada tres, obedeció a peticiones de ciudadanos para obtener datos sobre partidos políticos.
Aunque reconoció que los partidos atraviesan por una "crisis de credibilidad" consideró que se deben fortalecer y que el ser sujetos obligado de escrutinio y transparencia les abre una ventana de oportunidad para abrirse directamente a los ciudadanos, pues el INE, ya no será intermediario.
"Los partidos serán encargados directamente de entregar información y se elimina la función de garantía que tenía el instituto como receptor, tramitador y vigilante, pero coloca a los partidos en una inigualable oportunidad de oro para que sean quienes directamente informen a los ciudadanos, no deben desaprovecharla" estimó.
Córdova consideró que los partidos son figuras insoslayables de los sistemas políticos, por lo que con reglas democráticas habrá transparencia. "Si la transparencia fortalece la democracia, también fortalece la vida institucional y los partidos. Los partidos son y seguirán siendo los principales actores del sistema electoral y en lugar de eliminarlos debemos encontrar fórmulas para esquemas de exigencia que obliguen que los actores en la contienda se vuelvan un ejemplo en la rendición de cuentas".
En el Primer Seminario "Transparencia, partidos y Democracia" también participó el presidente del TEPJF, Alejandro Luna Ramos, quien expresó que difícilmente puede concebirse a un sistema político sin los partidos y no es posible una democracia sin ciudadanos. "La información les pertenece".
Destacó que hace unos meses se reformaran diversas disposiciones del texto constitucional, entre ellas el artículo sexto, que garantiza los derechos fundamentales al acceso a la información y protección de datos personales.
"Esta modificación constitucional, obedece a las exigencias de los ciudadanos por extender el umbral de las obligaciones –tanto de actuar con transparencia y de rendir cuentas, como de proteger, respetar y garantizar derechos humanos– a aquellos actores sociales que inciden, indiscutiblemente, en el ejercicio de los derechos y libertades de las personas".
Luna se refirió a los partidos políticos como sujetos obligados y que constituyen una representación que no se limita a una designación de quienes actuarán en nombre y cuenta de otros, sino aquella que asegure que se reflejen las diversas tendencias, preferencias y necesidades del país "sin exclusiones".