¿Sheldon y Amy ganarán el Nobel? Esto es lo que revela el final de 'The Big Bang Theory'

¿Ganarán Sheldon y Amy un premio Nobel? ¿Quién realizará una actuación especial sorpresa? ¿Arreglarán finalmente el ascensor? Al menos es lo que revelan las sinopsis de los últimos dos capítulos de la exitosa serie de TV de CBS.

The Big Bang Theory, la serie sobre cuatro científicos brillantes pero socialmente torpes que valorizó la cultura pop de los geeks y los libros de cómics de nerds, emitirá sus dos episodios finales este jueves, poniendo fin a la comedia más vista de la televisión estadounidense.

"Es realmente un final muy dulce. Toca tus sentimientos", dijo Kaley Cuoco, quien interpreta a Penny, a periodistas después de que el episodio final fuera grabado el mes pasado.

En el periodo previo al final, los fans han visto al físico teórico Sheldon Cooper (Jim Parsons) y su mujer neurobióloga Amy Farrah Fowler (Mayim Bialik) con la esperanza de ganar el premio Nobel, y al el físico experimental Leonard Hofstadter (Johnny Galecki) reconciliándose con su fría madre Beverly (Christine Baranski).

También vieron que el romántico astrofísico Rajesh Koothrappali (Kunal Nayyar) toma la decisión de no mudarse a Londres para casarse y que el dueño de una tienda de cómics Bloom (Kevin Sussman) y su novia Denise (Lauren Lapkus) acuerdan mudarse juntos.

La cadena CBS dijo que en el primero de los dos episodios de este jueves Sheldon y Amy esperan noticias, mientras que en el segundo aparece Raj haciendo un nuevo amigo, a Penny y Leonard tratando de guardar un secreto y al ingeniero mecánico Howard Wolowitz (Simon Helberg) y su esposa microbióloga Bernadette Rostenkowski (Melissa Rauch) dejando a sus hijos por primera vez.

Aún queda por ver si el elevador descompuesto del edificio de Sheldon, que ha estado roto desde el 2007, será reparado.

El final será seguido por una retrospectiva de los momentos más memorables de los últimos 12 años.

The Big Bang Theory comenzó en 2007 y ganó 10 premios Emmy, cuatro de ellos para Parsons. Cinco años después, fue la comedia número 1 de la televisión estadounidense con una audiencia de unos 20 millones de personas.