La Agencia Europea de Medicamentos (EMA) desaconsejó el uso de la vacuna contra contra el COVID Janssen en personas que hayan sufrido previamente el síndrome de extravasación capilar debido al registro de tres casos que desarrollaron dicha afección luego de ser inoculados.
En los tres casos registrados, las personas que habían sido vacunadas con este antígeno presentaron el síndrome de extravasación capilar dentro de los dos días posteriores a la vacunación.
Uno de los afectados tenía historial clínico con este síndrome y dos de ellos fallecieron después.
Por lo cual, el comité de seguridad de la EMA recomendó incluir esta afección como un nuevo efecto secundario provocado por la vacuna de la estadounidense Johnson & Johnson, y llamó a advertir a los pacientes para que avisen a su médico si cuentan con antecedentes de esta enfermedad.
Anteriormente, la EMA también descartó el uso de la vacuna de AstraZeneca en personas que hayan tenido este síndrome, esto luego de que se registraran seis casos dentro de los cuatro días posteriores a la inyección.
¿Qué es el síndrome de extravasación capilar?
El síndrome de fuga capilar sistémica es un trastorno poco frecuente caracterizado por brotes repetidos de fugas masivas de plasma de los vasos sanguíneos a las cavidades y músculos del cuerpo cercanos.
Esto da como resultado una caída brusca de la presión arterial que, si no se trata, puede provocar una insuficiencia orgánica y la muerte, de acuerdo con la institución médica Mayo Clinic.
También denominada enfermedad de Clarkson, esta enfermedad puede confundirse con reacciones graves a infecciones generalizadas (shock séptico) o reacciones alérgicas graves (shock anafiláctico).
Los ataques pueden desencadenarse por una infección respiratoria en las vías superiores o un esfuerzo físico intenso. La frecuencia de los ataques puede variar de varios por año a un solo caso en la vida.