Un estudio del Ministerio de Salud de Chile (MINSAL) divulgado este martes mostró una caída del 5 por ciento en la efectividad de la vacuna china de Sinovac en la prevención de casos sintomáticos del COVID-19, mientras la vacuna estadounidense de Pfizer disminuyó en un 3 por ciento.
La efectividad para prevenir la muerte se mantiene virtualmente igual con Sinovac, mientras Pfizer mostró un aumentó de un 8.2 por ciento en la prevención de muertes, según el informe entregado por el doctor Rafael Araos, asesor del MINSAL y exjefe de su departamento de Epidemiología.
Ambas vacunas mantienen altos niveles de efectividad para prevenir las hospitalizaciones y el ingreso a las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI).
El análisis del MINSAL midió la efectividad de los inmunizantes más usados en Chile, Sinovac y Pfizer, transcurridos seis meses exactos desde el inicio del masivo plan de vacunación chileno sobre una muestra que abarca 8.6 millones de personas inoculadas con Sinovac y 4.1 millones con Pfizer. En todos los casos habían transcurridos más de 14 días a partir de la segunda dosis.
Se trata del tercer estudio de efectividad que se realiza en Chile, un país de 19 millones de habitantes que se ubica entre las naciones del mundo con mayor porcentaje de población vacunada. Hasta julio un 87 por ciento de los 15.2 millones de personas que se busca inmunizar habían recibido la primera dosis y un 80 por ciento ya completó el proceso de vacunación.
Araos precisó que Sinovac es efectiva en el 58.4 por ciento de los casos para prevenir la infección por COVID-19 (frente al 63.6 por ciento de efectividad mostrado en junio), evita la hospitalización en un 86 por ciento (rente al 87 por ciento pasado), evita en un 90 por ciento el ingreso a las UCI y previene la muerte en el 86.4 por ciento de los casos.
La vacuna de Pfizer mostró una efectividad del 87.69 por ciento en la prevención de COVID-19 sintomáticos (90.9 por ciento), mantiene el 97 por ciento para prevenir la hospitalización y un 98 por ciento la llegada a terapia intensiva y previene la muerte en el 100 por ciento de los casos, efectividad que era de un 91.8 por ciento en junio.
Por primera vez se midió la eficacia de la vacuna británica sueca AstraZeneca en una muestra de 2 mil 720 personas que fueron seguidas durante los últimos dos meses. Según el estudio, previno en un 68.68 por ciento las infecciones y en un 100 por ciento las hospitalizaciones, ingreso a cuidados intensivos y la muerte.
A seis meses del inicio de la vacunación masiva, Chile ha mostrado un fuerte descenso de contagiados. El martes informó de 616 nuevos casos diarios, muy lejos de los 9 mil 171 infectados el 9 de abril pasado.
La disminución de infecciones en el país sudamericano llevó al gobierno a levantar gradualmente las cuarentenas en sus 346 comunas, exceptuadas cuatro; permite una gran movilidad de quienes comprueban con un carné que completaron su proceso de inmunización; se han abierto restaurantes, cines y hasta algunas discotecas y las regiones que superaron el 80 por ciento de habitantes vacunados pueden retrasar en dos horas el toque de queda, que en el resto del país rige de diez de la noche a cinco de la mañana.
Sin embargo, las autoridades están alertas ante una eventual expansión de los infectados con la contagiosa variante Delta. La víspera se informó que hay 59 infectados por esta variante, de los cuales 55 corresponden a personas que regresaron del extranjero o fueron casos estrechos de ellos, y cuatro son el resultado de transmisión comunitaria.
Chile registra 1.6 millones de contagiados desde el inicio de la pandemia, en marzo del año pasado, y más de 35 mil fallecidos.