Un nuevo estudio comprobó que una tercera dosis de la vacuna Pfizer ofrece una protección del 85 por ciento contra el ingreso hospitalario por ómicron, del COVID-19, en los primeros tres meses después de recibir el refuerzo; sin embargo, pasado este tiempo se detectó menor defensa contra esta variante.
La protección contra la variante ómicron también disminuyó para la forma más leve de infección, indican los investigadores del Departamento de Investigación y Evaluación de Kaiser Permanente en el Sur de California.
“Estos hallazgos reiteran la necesidad de continuar con el desarrollo de estrategias adicionales para garantizar la protección a largo plazo contra la infección grave por SARS-CoV-2 causada por la variante ómicron o futuras variantes que se deriven de esta sepa preocupante”, escribieron los investigadores en el estudio publicado en la revista “The Lancet Respiratory Medicine”.
Entre los hallazgos, se señala que después de 2 dosis de la vacuna Covid-19 de Pfizer, la efectividad contra ómicron fue del 41 por ciento contra el ingreso en el hospital y del 31 por ciento contra las visitas al área de urgencias después de 9 meses de su aplicación.
Con tres dosis, la eficacia contra la hospitalización relacionada con el ómicron fue del 85 por ciento a menos de 3 meses; sin embargo, cayó al 55 por ciento poco después de los tres meses o más.
Además, señalaron que en el futuro es posible que se necesiten dosis adicionales de vacunas contra el COVID-19 actuales, adaptadas o novedosas para mantener una alta protección contra infecciones graves y suficiente presión vacunal en futuras oleadas de infección por SARS-CoV-2.
Esta investigación es de las primeras en informar resultados de seguimiento a largo plazo después de recibir una tercer dosis de refuerzo, estratificada por edad. Al igual que un informe reciente de los Centros para la Prevención y el Control de Enfermedades (CDC) que muestran una disminución de la eficacia de las vacunas de ARNm contra el COVID-19
“También detectamos signos tempranos de disminución de los resultados graves causados por la variante ómicron a partir de los 3 meses posteriores a la recepción de una dosis de refuerzo. Sin embargo, se necesitan más datos de seguimiento a largo plazo para comprender completamente la verdadera magnitud de esta disminución”, indicó la doctora Sara Y. Tartof.
Para esta indagatoria, los científicos analizaron 11 mil 123 ingresos hospitalarios y visitas al servicio de urgencias que no dieron lugar a un ingreso hospitalario por infección respiratoria aguda. El estudio se centró en los registros de pacientes del Kaiser Permanente en el sur de California a partir del 1 de diciembre de 2021 y hasta el 6 de febrero de 2022, cuando permeaban las variantes delta y ómicron.