Dos nuevas subvariantes de ómicron están causando (de nuevo) un considerable incremento de contagios COVID en Sudáfrica. Se trata de BA.4 y BA.5, que se propagan a mucho mayor velocidad que la variante original.
Las y los científicos todavía no tienen claro se las nuevas variantes causan un aumento en las hospitalizaciones, lo que sí están pensando es que estas nuevas oleadas de la infección están estableciendo patrones predecibles.
‘‘Estas son las primeras señales de que el virus está evolucionando de manera diferente en comparación con los dos primeros años de la pandemia, cuando las variantes parecían aparecer de la nada’', explica Tulio de Oliveira, bioinformático de la Universidad de Stellenbosch, en Sudáfrica.
¿Por qué son más ‘predecibles’ las nuevas subvariantes?
El equipo de investigación de Oliveira analizó genomas virales de muestras clínicas y encontró que BA.4 y BA.5 surgieron a medicados de diciembre del 2022 e inicios de enero del 2022.
Los linajes han ido aumentando desde entonces y ahora representan entre el 60 y el 75 por ciento de los contagios de COVID en Sudáfrica.
Jesse Bloom, biólogo evolutivo viral en Fred Hutch, un centro de investigación en Seattle, Washington, está de acuerdo en que BA.4 y BA.5 se están propagando más rápido que otros linajes de ómicron.
“Lo que aún no está claro es por qué son más transmisibles”, dice. Ambos están estrechamente relacionados con BA.2, aunque no está claro exactamente cómo, agrega Bloom.
BA.4 y BA.5 portan una mutación clave llamada F486V en sus proteínas de punta, la proteína viral responsable de la infección y el objetivo principal de las respuestas inmunitarias. El equipo de Bloom descubrió previamente que esta mutación podría ayudar a las variantes a esquivar los anticuerpos que bloquean el virus.
Otro estudio, publicado en el servidor de preimpresión de ResearchSquare y dirigido por el virólogo Xiaoliang Xie de la Universidad de Pekín en Beijing, también encontró que los anticuerpos desencadenados por la infección BA.1 eran menos potentes contra BA.4 y BA.5. Moore dice que los resultados también concuerdan con sus experimentos no publicados.
¿Habrá una nueva ola?
Aunque BA.4 y BA.5 se han detectado en varios países europeos y en América del Norte, es posible que las variantes no desencadenen una nueva ola de COVID-19 en estos lugares, al menos de inmediato.
La aparición de estas cepas sugiere que el linaje de ómicron continúa mejorando al erosionar la inmunidad, dice Ho. “Está bastante claro que hay algunos agujeros en Omicron que se están llenando gradualmente con estas nuevas subvariantes”.
Si el SARS-CoV-2 sigue por este camino, su evolución podría llegar a parecerse a la de otras infecciones respiratorias, como la gripe.
Las variantes anteriores, incluidas alpha, delta y ómicron, diferían sustancialmente de sus predecesores inmediatos y todas surgieron, en cambio, de ramas distantes en el árbol genealógico del SARS-CoV-2.