La vacuna COVID-19 de Pfizer tuvo una efectividad del 73.2 por ciento contra la enfermedad en un ensayo con niños y niñas de 6 meses a cuatro años de edad, lo que refuerza los resultados que llevaron a la autorización de la vacuna en niños pequeños en junio.
El régimen de tres dosis se comparó con inyecciones de placebo durante el período en que la versión BA.2 de ómicron se difundió ampliamente de marzo a junio, dijeron Pfizer y su socio BioNTech este martes en un comunicado. Hubo 13 casos en el grupo vacunado y 21 en el grupo placebo, según el comunicado.
La vacuna de ARN mensajero de Pfizer y BioNTech fue autorizada para su uso en niños pequeños con base en los resultados que mostraron que generaba una respuesta inmune similar a la que se consideraba protectora en personas adultas. Cuando los reguladores autorizaron las inyecciones, dijeron que los datos de efectividad de Pfizer en niñas y niños pequeños aún no estaban maduros.
Las compañías planean enviar los datos actualizados a la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés), la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) y otros reguladores en las próximas semanas. También están desarrollando una vacuna que se dirigirá a las cepas omicron BA.4 y BA.5 que se están propagando ampliamente ahora, según el comunicado.
En tanto, la empresa rival Moderna fabrica una vacuna para niños y niñas pequeñas que se administra en dos inyecciones. Esa vacuna fue 51 por ciento efectiva para prevenir casos de COVID en menores de dos años y 37 por ciento efectiva para personas de dos a cinco años de edad.
Las acciones de Pfizer y los recibos de depósito estadounidenses de BioNTech cambiaron poco en el comercio antes de que se abrieran los mercados estadounidenses.