Cada día, más de un millón de personas contraen una Infección de Transmisión Sexual (ITS), de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS). Más de 30 bacterias, virus y parásitos diferentes se transmiten por contacto sexual, incluido el coito vaginal, anal o bucal. Algunas otras también pueden transmitirse de la madre al hijo durante el embarazo, el parto y la lactancia.
Es posible que contraer infecciones de trasmisión sexual sea potencialmente fácil, debido a que algunas de ellas no siempre presentan síntomas, sino hasta que surgen complicaciones.
No obstante, el presentar alguno de los siguientes síntomas pueden dar indicios de una infección de trasmisión sexual, de acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina:
- Llagas o protuberancias en los genitales o en la zona de la boca o el recto.
- Dolor o ardor al orinar.
- Secreción proveniente del pene.
- Flujo vaginal inusual o con mal olor.
- Sangrado vaginal inusual.
- Dolor o incomodidad durante las relaciones sexuales.
- Dolor e inflamación de los ganglios linfáticos, particularmente en la ingle.
- Dolor en la parte inferior del abdomen.
- Fiebre.
- Erupción en el tronco, manos o pies.
Estos síntomas pueden aparecer unos días después del contacto con el virus o la bacteria. No obstante, en algunos casos pueden pasar años antes de que una persona muestre algún problema perceptible, según el organismo que provoque la infección de trasmisión sexual.
¿Cuáles son las ITS que existen?
Existen ocho agentes patógenos vinculados con la incidencia de ITS. Las siguientes cuatro infecciones se pueden curar actualmente, según la OMS:
- Sífilis.
- Gonorrea.
- Clamidiosis.
- Tricomoniasis.
Las siguientes cuatro son infecciones víricas incurables:
- Hepatitis B.
- Infección por el virus del herpes simple (VHS).
- Infección por el VIH.
- Virus de los papilomas humanos (VPH).
A estas enfermedades se suman los brotes de nuevas infecciones que pueden contraerse por contacto sexual, como la viruela del mono, las infecciones por los virus Shigella sonnei o Neisseria meningitidis, o el ébola y el zika.
¿Cuáles son los tratamientos para las infecciones de transmisión sexual?
Aunque los antibióticos pueden tratar las ETS causadas por bacterias o parásitos, no existe cura para las enfermedades causadas por un virus; sin embargo, algunos medicamentos pueden ayudar con los síntomas y reducir el riesgo de propagar la infección.
¿Se pueden prevenir las infecciones de transmisión sexual?
Sí. El uso correcto de condones de látex reduce en gran medida la posibilidad de contraer una ETS, pero no elimina por completo el riesgo de contraerla o contagiarse, detalla la Biblioteca Nacional de Medicina.
Del mismo modo, existen vacunas para prevenir enfermedades como el VPH y la hepatitis B.